Jorge Prado se acerca peligrosamente al liderato del mundial de MX2

Era el momento de enfrentarse a la prueba más exótica del campeonato, sobre el poco atractivo circuito de Pangkal Pinang en Indonesia y bajo la permanente amenaza de lluvias torrenciales. El objetivo era claro, intentar salvar la cita sin sucumbir en el barro que un año antes le había dejado sin opciones en el campeonato.

Y bien que lo hizo. El gallego se enfrentó a esta difícil prueba con gran inteligencia, arriesgando lo justo y saliendo de Pangkal más cerca del liderato del mundial. Un cuarto y un tercer puesto en las mangas le sirvieron a Prado para subirse de nuevo al podio (y van diez), aprovechando el bajón de su máximo rival en la segunda manga para reducir dos puntos en el campeonato: "Sabíamos que esta carrera era muy complicada, por el circuito, por la climatología y por lo ocurrido el año pasado, así que tengo que estar muy contento con este resultado, con no bajarme del podio y encima reducir la ventaja de Jonass".

"La pista estaba muy incómoda, con roderas muy densas, pero resbaladiza en muchos sitios. No era fácil adelantar, pero he podido superar a Pauls y obtener unos puntos muy valiosos. Este año nuestra obsesión es la constancia y es muy importante ir salvando todas las citas difíciles sin perder muchos puntos”.

Al continente asiático solo habían acudido dos españoles, Jorge Prado e Iker Larrañaga, pero para desgracia del actual Campeón de España su rueda delantera tocó con la trasera de otro participante en plena recta, sufriendo una fea caída en la que se lesionó la clavícula.

En la categoría de MXGP, los dos contendientes del campeonato volvían a verse las caras, ya que Jeffrey Herlings reaparecía tras su lesión de clavícula. A poco más de dos semanas de su operación, la gran duda era saber si estaría en forma para aguantar el ritmo de Antonio Cairoli, su compañero en Red Bull-KTM, pero rival en la pista. Herlings salió primero en la manga inicial, pero después cedió ante el empuje de Cairoli y de forma inteligente se limitó a controlar a Clement Desalle y evitar así perder demasiados puntos.

En la segunda manga Herlings atacó de salida, se fue por delante, mientras Cairoli cometía algunos errores. En la parte final de carrera se produjo un doble golpe de teatro, ya que Herlings se fue por los suelos, dejando paso libre a Cairoli, pero poco después este le devolvió el regalo con una nueva y aparatosa caída que le dejó dolorido el brazo. Herlings se llevó el gran premio, pero la pelea por los puntos se quedó en tablas.