¿Qué se siente encima?

La moto que hemos usado es la superventas de Husqvarna y para nosotros la moto más polivalente del mercado, la FE 350. Este modelo, renovado por completo para este año además de recibir el control de tracción monta nuevas suspensiones, motor, chasis y carrocería. Pudimos probarla a fondo en Suecia en el número 82, así que no os vamos a freir con todos los detalles técnicos y novedades porque hoy nos centramos en su control de tracción.

Las primeras sensaciones son buenas y sobre todo normales. Comenzamos a rodar con tranquilidad con el terreno en buen estado y la moto transmite una seguridad tremenda. El conjunto para 2017 es súper ligero, las suspensiones trabajan mucho mejor que el año pasado sobre todo la horquilla Xplor que tiene un tacto fantástico y mayor resistencia a los topes que la antigua 4CS. El motor 350 es una delicia, su tacto muy suave casi eléctrico ayuda a transmitir la potencia al suelo con mucha efectividad y es que esta 350 es una de las motos con mejor tracción del mercado sin contar con el control.

Cuando conectamos el control de tracción las sensaciones en la mayoría del tiempo son exactas a estar con él desconectado y sólo si realizamos una conducción muy agresiva en la que la rueda trasera va deslizando todo el rato notaremos su funcionamiento.

¿Cuándo actúa?

Para que este actúe la pérdida de tracción se ha de producir, con lo que si esperamos que al abrir gas en la salida de una curva nos controle la derrapada como si de un videojuego se tratase, esto no ocurrirá. Podemos derrapar y avanza mucho optimizando la tracción y con subidas de revoluciones tan rápidas como con él desconectado. En caso de que la moto nos dé un “latigazo” ahí es donde actúa el control. Es complicado hacerlo saltar en estas situaciones porque tenemos que estar muy al límite cerca de una caída y casi mejor no tentar a la suerte. Es más que nada un “seguro de vida” pero con pocas garantías en estas situaciones, haciendo Enduro por caminos lo podemos dejar siempre conectado.

Cuando entramos a las trialeras entonces es cuando de verdad vamos a notar sus beneficios. En pasos complicados de barro, en subida, en escalones de piedra mojada o cualquier obstáculo que la moto nos patine y tengamos que echar el pie a tierra ahí es donde el control actúa de forma magistral, es casi como si cogiéramos el embrague lo justo para ayudar a que la rueda vuelva a coger tracción y todo de forma automática. Es una gran ayuda y sobre todo es una seguridad mental a la hora de afrontar la trialera y ver la luz naranja indicando TC todo lo haces más tranquilo.

La única situación que quizá lo desconectaríamos es en arena profunda o en barro muy espeso, situaciones que requieran abrir gas a fondo y toda la potencia del motor. En estos casos, que son muy poco comunes, el control actúa todo el rato y limita la potencia un poco lo que nos haría ir más lentos.

Sin duda es un sistema que para ser una primera aproximación creemos que es muy acertado. No se nota absolutamente nada si se hace una conducción normal pero cuando tiene que actuar lo hace, no tan pronto como nos gustaría porque nos hemos visto muy cerca de caer y no ha actuado, pero en muchas otras ocasiones nos saca del atolladero. El control de tracción en Enduro ya es una realidad y en los próximos años experimentaremos una gran evolución en este aspecto al igual que ha ocurrido en el mundo de las motos de asfalto. En el offroad desde la llegada de la inyección, es mucho más fácil implementar estos sistemas y muy pronto los veremos en toda clase de marcas de motos.

El próximo año se espera que el nuevo motor de KTM/Husqvarna de inyección 2T pueda poder montar éste sistema en el que creemos funcionará mejor que en las 4T ya que son más propensas a tener esas subidas repentinas de revoluciones. De momento en Husqvarna han sido los primeros y ya cuentan con esa ventaja, siendo sus usuarios los que pueden disfrutarla antes que nadie.