Cómo es una moto para principiantes

Elegir una moto cuando se empieza sobre dos ruedas puede resultar más difícil de lo que parece. Si van a ser tus primeros pasos como motorista es bueno que sepas cómo es una moto para principiantes. Para empezar no vale cualquier moto, lo mejor es que empieces poco a poco y una vez que hayas ganado confianza con motos poco exigentes entonces des el salto a motos mayores.

Te contamos qué características ha de reunir una buena moto para principiantes, así, si estás empezando, todo te será más sencillo desde el principio. Todos hemos empezado desde cero en algún momento y muchos habrían deseado tener a mano una moto especialmente diseñada para motoristas poco experimentados. Hoy esas motos existen y son muchas las opciones que te pueden interesar si va a ser tu primera moto, te recomendamos buscar una que reúna las características que aquí te contamos. Eso sí, ten cuidado con los amores a primera vista y evita errores que te puedan jugar una mala pasada y te condicionen tu futuro como motorista.

Si todavía no tienes el carnet y dudas si debes sacarte el de moto o el de ciclomotor, puedes consultar este artículo.

Una vez que empieces… la práctica y la experiencia harán todo lo demás, y verás que al afianzar bien tus inicios rápidamente tendrás la capacidad de plantearte motos más avanzadas. Pero al elegir una moto para empezar, ten en cuenta los siguientes factores.

Una moto ligera

Sin duda el peso es lo primero que puede echar para atrás cuando se empieza en moto. Si no se tiene ninguna experiencia previa, y lo único que se ha cogido antes ha sido una bicicleta, es normal que un elevado peso imponga a los más principiantes. Una moto pesada, o con el centro de gravedad especialmente alto, puede ser un problema al tener que mover la moto en parado o a baja velocidad.

Recomendamos una moto ligera y fácil de manejar, con el centro de gravedad lo más bajo posible, compacta y accesible. Se ha de poder sostener sin problemas cuando estamos sobre ella sin que moverla hacia un lado y el otro no nos ponga en un compromiso.

Una moto de baja potencia

Empieza con una moto de poca potencia, ya habrá tiempo de subir de prestaciones más adelante. Que no te puedan las ganas, lo mejor que puedes hacer es empezar poco a poco y dejar las motos de mayor potencia para cuando tu experiencia te lo permita, busca una moto a la que no le sobren CV.

Hay fantásticas motos de marchas de 125 cc naked y económicas que son una excelente puerta de entrada al mundo de motos de mayor cilindrada y potencia.

Evitarás sustos y no pondrás en peligro tu propia seguridad, una mala experiencia puede hacer que se te quiten las ganas de tener moto. Ya llegarán las motos de mayor potencia más adelante si lo deseas o si lo necesitas, pero deja que el tiempo y la experiencia te lleve a más potentes, y no las prisas. Busca una moto que puedas dominar, no una moto que te domine a ti.

Una moto con el asiento bajo

Si aún no lo sabes lo comprobarás en el mismo momento en el que te subas a una moto: la altura del asiento es importantísima. La confianza que sintamos al subirnos en una moto no sólo lo marca su ligereza sino también la facilidad con la que lleguemos con los pies al suelo.

Una buena moto para principiantes es aquella que permite llegar al suelo con los dos pies sin problemas, un error sería si llegásemos sólo de puntillas. No controlaríamos su peso ni sus movimientos y la manejabilidad se vería rápidamente comprometida. Si una vez sentados en su asiento no llegamos bien al suelo la moto parecerá que pesa mucho más y la sensación de inseguridad será mucho mayor. Busca una moto con el asiento a una altura accesible para tu estatura y que te permita alcanzar el suelo cómodamente.

Una moto con una frenada segura

Frenar en moto es algo que impone cierto respeto cuando se empieza en moto, sobre todo a la hora de frenar con el freno delantero, mucha gente hasta piensa que es peligroso. Nada más lejos de la realidad si se sabe cómo hacerlo.

Por eso, mientras se gana experiencia, es recomendable contar con una moto que ofrezca ayudas en la frenada, como un sistema de frenada ABS o un sistema de frenada combinada que reparta la potencia de frenado en ambas ruedas a la vez. Con la normativa Euro 4 todas las motos deben llevar asistencia a la frenada, un factor a tener en cuenta si dudas entre una moto nueva o de segunda mano.

Esto otorgará a los más principiantes un plus de confianza y seguridad a la hora de frenar.

Una moto ¿o mejor un scooter?

Si jamás has circulado sobre dos ruedas, ni siquiera en bicicleta, quizá durante tus primeros pasos lo primero será centrarte en manejar una moto con seguridad y prestar toda tu atención a mantener el equilibrio, acelerar y frenar.

Si es tu caso ¿por qué no empezar con un scooter con el que poder olvidarte de cambiar de marchas? Si le vas a dar un uso eminentemente urbano quizá sea una buena opción para ganar confianza, destreza y habilidad, y ya te preocuparás de subir y bajar marchas cuando te sientas con algo más de preparación. Además, los scooters están llenos de ventajas si los vas a usar en ciudad.