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Conducción de moto: aprende a pilotar

Una cosa es montar en moto y otra muy diferente es pilotarla. Queríamos mejorar nuestra técnica y nos pusimos en manos de los especialistas de la escuela Lorenzo Competición. Una jornada muy intensa pero altamente eficaz. Así se aprende a pilotar.

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Redaccion Moto1pro
Jorge Torrecillas
Autor Foto
Jorge Torrecillas
Fecha20/08/2015
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Jorge Torrecillas
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Fecha20/08/2015


Estamos acostumbrados a probar motos, pero no a que nos pongan a prueba. Queríamos vivir en primera persona lo que supone realizar un curso intensivo en una de las mejores escuelas de pilotaje de nuestro país, la de Lorenzo Competición. El coordinador de todas las escuelas, Iván Sánchez, nos llevaba insistiendo mucho tiempo en que teníamos que probarlo así que reservamos un día, cargamos los monos de cuero y nos plantamos en la sede de Guadalajaa dispuestos a aprender mucho.

Sinceramente estaba un poco escéptico. ¿Se mejoraría tanto en tan poco tiempo? ¿La técnica sobre una pit bike es aplicable a una moto grande? ¿Servirá solo para pista o también para mi día a día? Salí de dudas en tiempo récord.

¿Para quién?

Las escuelas de Lorenzo Competición son conocidas internacionalmente por formar a niños y prepararlos para convertirse, si quieren, en pilotos de velocidad. Pero su preparación va mucho más allá. Abarca cualquier edad y nivel, por lo que puedes acudir a sus clases para mejorar tus habilidades sobre la moto para un uso diario o bien para machacar el crono en cualquier circuito.

Las motos

Las motos que se utilizan en los cursos básicos son pequeñas pit bike de 4t y cilindradas comprendidas entre 140 y 160 cc. Son ideales por su sencillez mecánica y por su fácil manejo para pilotos de cualquier talla. Pero se puede ir avanzando y llegar a pilotar las máquinas Pre-GP que han desarrollado ellos mismos. De hecho ahora mismo se encuentran trabajando en una Pre Moto3 con motor de KTM 390. Un auténtico juguete para salir a rodar y que pondrán a la venta por un precio muy competitivo.

Un poco de teoría

Antes de arrancar las motos es necesario tener unos conocimientos básicos sobre física. Sí, sí, como lo lees. En moto las fuerzas que se generan son enormes y hay que saber manejarlas para que trabajen a nuestro favor. El reparto de pesos afecta enormemente en las fuerzas centrífuga y centrípeta, por ello debemos saber cómo colocarnos en todo momento para que la moto haga lo que nosotros queremos donde nosotros queremos. Algo tan sencillo como desplazar el cuerpo ligeramente hacia un lado o sacar más o menos la cadera o la cabeza variarán enormemente el paso por curva. Vamos a aplicarlo..

Pista para coger confianza

En el centro de entrenamiento que tiene Lorenzo Competición tienen varias pistas para realizar los diferentes ejercicios. Para calentar se emplea un circuito dibujado con neumáticos muy sencillo que ayuda a familiarizarse con la moto y a coger confianza. Unos minutos de disfrute antes de ponernos a prueba y sufrir un poquito…

 

Los temidos ochos

Una vez que te sientes a gusto en la pequeña montura llega la hora de la verdad. Iván se encarga de supervisarte en todo momento. Sobre el asfalto hay dibujadas unas marcas donde se colocan estratégicamente unos conos. Hay que hacer ochos. Parece fácil, pero con el mono de cuero y una moto tan pequeña ya no lo parece tanto. “¡Gira la cadera, la mirada al centro y rápidamente al siguiente giro, tira de la rodilla hacia atrás, saca el codo… “, instrucciones que te van llegando a cada instante y que piensas que no vas a ser capaz de asimilar. Al principio se te acumula el trabajo, pero pronto empiezas a ver que si llevas la mirada al sitio y exageras la postura los giros son posibles. Cada vez vas más suelto hasta que de pronto tu rodilla está deslizando y vas empalmando giro con giro a buen ritmo. Crees que lo estás bordando hasta que te muestran un vídeo de un chavalín haciendo lo mismo en un ocho mil veces más pequeño y mil veces más rápido. Increíble la destreza de los más jóvenes. Todo es practicar para ir subiendo el nivel.

Esta fase es crucial para coger la técnica. Después se van pasando por “ochos” de distintos tamaños para practicar diferentes pasos por curva. Pero la técnica siempre es igual. Mirada al punto clave, postura “al ataque” y gas constante. Es agotador. Las agujetas pueden durarte varios días.

En la escuela los jóvenes pasan exámenes. Estos les sirven para ir ganando nivel, como en las artes marciales. Por tanto un debutante será Casco Blanco y el más experimentado será Casco Negro. Un buen sistema en el que además se trabaja con el novedoso método de la grafopsicología, que ayuda enormemente a mejorar el rendimiento en la pista.

Dirt Track para terminar

Después de las clases teóricas y prácticas toca el turno de aprender a derrapar y desfogarse un poquito. La recién inaugurada pista de dirt track nos esperaba para probarla con una pequeña KX 65. Una avispilla muy divertida que con ruedas de carretera se iba para todos lados. Parte del entrenamiento de la escuela también está en controlar la derrapada y qué mejor que hacerlo en un espacio especialmente diseñado para ello.

Es bueno para…

Una formación de este estilo debería ser obligatoria o incluirse con el carné de conducir. No sólo te da las claves para entender el comportamiento de la moto, sino que te aporta un plus de seguridad para anticiparte o reaccionar a los imprevistos que puedan surgir cuando estás sobre la moto. Si además te gusta hacer tandas e incluso correr alguna carrera te darás cuenta de que con unas lecciones mejorarás mucho tu estilo y lo más importante: tus tiempos. Una experiencia muy recomendable para todo amante de las dos ruedas.