Destacados:
Su regreso al equipo Zanardo, esta vez sobre una Husqvarna, ha significado una renovación como piloto para Alex Salvini. Su reencuentro con Franco Mayer ha permitido al italiano recuperar toda su magia sobre la moto.
No te pierdas...
Celebró su primer y único título de Campeón del Mundo de Enduro vestido con la indumentaria de Rocky Balboa y cinco años después, a tenor de su fantástico arranque de temporada, Alex Salvini va camino de repetir su gran éxito de 2013 en esta ocasión al más puro estilo Terminator porque llega al ecuador del Mundial, a Arco di Trento, como líder del campeonato de EnduroGP y E2. Sí, “Salvo” está de vuelta. Alex se ha reencontrado con la mejor versión de si mismo con la nueva Husqvarna de la escuadra Zanardo; una moto que en muy pocos meses se ha hecho completamente suya.
Sí, la verdad es que ha sido mucho mejor de lo que esperaba. Sabíamos que Finlandia sería difícil y creo que este año aún lo ha sido más que el año anterior porque había mucha más nieve, hacía más frío y la carrera se hizo eterna. A pesar de ello conseguir un segundo y tercer puesto fue perfecto para mi. En la absoluta perdí algunos puntos más pero damos el resultado por muy bueno. Luego, en España y Portugal fue todo aún mejor de lo que esperábamos. Aquel fue el auténtico inicio del Mundial y llegar a casa con cuatro victorias y un tercer puesto en EnduroGP y cinco victorias, dos segundos puestos y un tercer lugar en E2, estando siempre en el podio de mi categoría, es simplemente magnífico. Nos encontramos a mitad de temporada y a pesar de que es muy larga siempre es mejor llegar aquí como líder que por detrás. Estoy muy satisfecho este inicio del mundial y también en el Campeonato de Italia, donde también voy líder en la ‘Assoluta’.
Obviamente como piloto siempre tengo en cuenta la Scratch porque es importante para nosotros. En el 2013, cuando gané el Mundial, también gané la Scratch por lo que fue una doble satisfacción para mi. Aunque está claro que mi objetivo primero es ganar mi categoría con los ojos puestos también en la clasificación absoluta.
¡Todo! El equipo, la moto e incluso yo... que he recuperado mi feeling con la moto y unas sensaciones que el año pasado perdí mucho con Beta. Me he reencontrado con mi viejo equipo, porque con Franco Meyer ya había coincidido cuando corría con Honda. Estoy muy contento con todos estos cambios, con cómo va la moto y cómo está trabajando el equipo. Mi Husqvarna va muy bien; hemos hecho un gran trabajo. Este invierno hemos tenido que trabajar mucho para recuperar la confianza que había perdido en las dos últimas temporadas y volver a ser el piloto que soy actualmente ahora.
No te pierdas...
El punto fuerte es que no tiene puntos débiles destacables. Eso es lo más destacado para mi. Me siento a gusto con ella y he vuelto a jugar de nuevo sobre la moto, que era lo principal; volver a divertirse. Creo que esa es la clave de nuestros buenos resultados.
Sí, Franco no necesita ningún tipo de presentaciones. Su equipo ha ganado muchísimos mundiales, empezando por Grasso, pasando por Mika Ahola y luego conmigo. Han pasado tantos pilotos por las filas de su escuadra que él sabe de verdad que debe hacer un team manager y cómo afrontar las carreras. Y ese es uno de los principales motivos por los que decidí cambiar de equipo y volver con él.
Digamos que la Honda era una moto más extrema porque era una moto completamente de motocross. En cambio esta Husqvarna es una moto de enduro adaptada a mi pilotaje, aunque la he extremado un poco más y lo cierto es que es muy parecida a una moto de cross. Principalmente he vuelto a rodar con ‘settings’ de suspensiones muy duras, cosa que con la anterior Beta no hacía.
Sí, rotundamente sí. Seguramente he pasado casi toda mi vida pilotando cuatro tiempos. Del 2000 al 2003 lo hice con una 125 de dos tiempos, pero luego siempre lo he hecho con motos de válvulas. Así que sí, puedo decir que soy un hombre de cuatro tiempos.
Volvamos a la competición; el Mundial, con la aparición del WESS, no parece pasar por sus mejores momentos. ¿Cómo lo ves tú?
El Mundial actualmente está pasando por un momento, digamos, de dificultad pero su nivel es siempre el mismo porque casi no falta nadie de los más rápidos. Faltan sólo García y Watson. El hecho que KTM y Husqvarna no estén aquí es feo para todos, para la FIM y para el ambiente en general... pero el Mundial es siempre el Mundial. Sigue siendo el campeonato de máximo nivel internacional.
Sí, ahora toda mi concencentración está en eso. Mi objetivo es ser el primero en el Mundial y también en Italia. Ahora tenemos un período muy intenso con un par de carreras del Campeonato del Mundo y también otro del ‘assoluto’ italiano en apenas un mes. Son muchas carreras y muy distintas; la arena de Estonia, la extrema de noche y el motocross Arco di Trento... Por eso tendremos que entrenar y preparar muy bien estos retos que nos esperan por delante.
Completamente diferente de todo lo que he hecho, ya que nunca antes había participado en ninguna prueba extrema. Tanto a mi como a mi equipo nos picó la curiosidad de ver cómo era esta prueba en la que los aficionados se divierten mucho y es menos estresante que el Mundial. Me gustó hacerla porque pude vivir una nueva tipología de competición; tenía curiosidad por ver de primera mano como era el WESS. Lo hice con una 300 2T totalmente nueva que no había ni probado. Traímos la moto expresamente para correr allí. Fue una experiencia divertida; una carrera nueva, con una moto nueva... todo muy novedoso. Un descubrimiento.
Fue díficil para mi porque no estaba preparado. Si quieres hacer estas carreras debes dedicarle el tiempo y la preparación que requieren y tener la moto adaptada. Yo no lo estaba así que el viernes y el sábado salí a disfrutar y el domingo preferí retirarme y evitar así cualquier problema que pusiera en riesgo el resto de la temporada, que al fin y al cabo es lo que me interesa.
Creo que es bueno porque puede ayudar a acercar a los espectadores a nuestro mundo ya que las televisiones pueden retransmitirlo en directo. Son iniciativas que nos ayudan aunque no sean puramente carreras de enduro. Lo cierto es que estamos ya en el año 2018 y alguna cosa tiene que cambiar, sobre todo por el cerco de las reglas ambientales. Tenemos que innovar algo para seguir respetando el medioambiente y acercar nuestra disciplina a la gente.Y creo que eso juega a favor de este nuevo tipo de carreras.
He sido piloto de motocross, he hecho carreras de supercross y actualmente soy un piloto de enduro. Parece un paso natural dar el salto al Dakar aunque a mi, de momento, no es algo que me atraiga. No me gustan ese tipo de carreras aunque no me importaría probarlas... ¡quizás cambiaría de idea! De todos modos creo que en un futuro lo que de verdad me gustaría es permanecer vinculado a este mundo de la competición. Aún no estoy preparado para dejar esto. A mis 32 años podría decir que he pasado prácticamente toda mi vida en este ambiente. Compito desde los 15 años, primero en el Mundial de motocross y luego en el de enduro. Creo que en el futuro seguiré mi relación con las carreras y la competicion aunque no sé todavía como.
Más sobre:
Relacionados