Coche contra moto: ¿Quién sube más?

Hay una rivalidad de toda la vida entre las dos y las cuatro ruedas. Para ser objetivos, sí, ya sabemos que esto es una revista de enduro… Pero nos gusta toda clase de vehículos en los que se pueda dar gas. La cabra tira al monte.

Los candidatos

MOTO: Para saber quién sube más, hemos utilizado La KTM 300 EXC  del equipo de enduro extremo Zona Paddock EnduroPro. Nada mejor que una moto preparada para las pruebas más duras del mundo para competir en este desafío. Cuenta con suspensiones preparadas para conseguir una mayor tracción, culata con cámara regulable, asiento racing con mayor grip, cinchas para tirar de la moto, cubiertas y mousses superlight, entre otros accesorios.

EL COCHE: Hemos querido contar con un auténtico trepador. Un Suzuki Vitara 2.0 V6 de gasolina preparado hasta arriba para trialear en competición. Aunque el motor apenas recibe modificaciones sí rinde unos generosos 140 CV, una cifra muy alta para sus escasos 1100 kg de peso y corto desarrollo. Ejes y trapecios modificados y reforzados, transmisión acortada, suspensiones de alto rendimiento y que dan más altura, amortiguador de dirección, ruedas sobredimensionadas BF Goodrich (31x10.5-15), winch, bacquets, snorkel para vadeos…. y un sinfín de detalles más que convierten a este pequeño 4x4 en un arma perfecta para la montaña.

Las pruebas

Quisimos enfrentar los vehículos en varios terrenos y ver cuál es más eficaz en cada uno. Hemos buscado dos pilotos experimentados en cada especialidad, Fran Rico, nuestro redactor jefe y piloto de enduro, y Manuel Gutiérrez, especialista en 4x4.  

Aceleración

No hay nada que decir. La ligereza de la moto sumado a su explosivo motor de 2t deja muy atrás al coche tras los primeros metros gas a fondo. A no ser que estemos sobre una superficie de mínima tracción como barro, donde las cuatro ruedas motrices marcarían la diferencia, la moto gana a todas luces.

Subida extrema

Con un buen piloto a los mandos la moto es capaz de subir más y más rápido cualquier subida complicada. Sin embargo, si su pendiente supera la lógica el Vitara sacará a relucir sus armas y con su reductora combinada con el Winch podrá salir del peor de los atolladeros. Si la subida es muy larga y el piloto/moto pierden fuelle hasta perder la tracción están perdidos. Tocará volver a bajar y coger más inercia. La habilidad del piloto marcará las diferencias.

Trialera

Por su ligereza y libertad de movimientos la moto se desenvuelve con más soltura en terrenos más técnicos. El paso por zonas estrechas es más fácil y cambiar la trazada a mitad de camino resulta muy sencillo. El coche aunque sube por sitios impensables es más torpe y pesado y se verá atascado en escalones elevados o cortados de más de 80 cm.

Vadeo

Es aquí donde el 4x4 se lleva la gloria. No hay río que se le resista e incluso hundiéndose más allá de las ventanillas es capaz de seguir adelante. El secreto radica en su toma de aire elevada, snorkel, que evita que entre agua al motor. La moto tiene un límite muy claro y a no ser que seas como Iván Cervantes en aquella proeza de “aquaplanning” de 50 m estarás perdido.

Bajada

Este punto es complicado. En una bajada muy pronunciada la moto aún clavando sus frenos puede descontrolarse. El 4x4 con su reductora y freno motor puede hacerlo despacio y controlando en todo momento. Eso sí, existe el riesgo de vuelco si se sobrepasan los límites. En la moto con bajarte e ir poco a poco con pies en el suelo y clavando frenos será suficiente y así se minimizará el riesgo. (Recordemos escenas de ErzbergRodeo donde ni siquiera Graham Jarvis desciende sobre la moto y lo hace dejándose arrastrar cuesta abajo)

¿Dónde gana el coche?

Con ambas bestias tendrás unas horas cargadas de adrenalina. Con el Vitara el campo está limitado porque es un coche, con sus dimensiones y limitaciones, no lo olvides. Exceptuando el vadeo, la moto es más eficaz en cualquier terreno.

Por el contrario podrás disfrutar del off road con otras tres personas. ¿Te imaginas llevar en tu enduro a toda la familia e ir comentando la jugada en directo? Además, haga la temperatura que haga irás confortable en su interior y el riesgo de accidente en muy inferior. Incluso volcando, con sus barras protectoras, las posibilidades de hacerte daño son pocas.

Cuestión de euros

Una moto de enduro extremo como la que ves supera por muy poco el precio de la de una unidad producida en serie. Por poco más de 10.000 euros tendrás una máquina equipada hasta arriba para competir y no muy distinta de la de Jonny Walker.

En el coche deberás invertir primero en comprar el vehículo y después gastar más de esa cantidad en dejarlo listo para que sea realmente eficiente en el campo. El coste puede multiplicarse por cinco tranquilamente respecto al de la moto.

La cuestión es divertirse

Sea como fuere los que amamos el campo y el motor buscamos diversión y adrenalina. Con ambos vehículos podrás disfrutar muchísimo, pero conociendo bien los límites de cada uno. En el coche no hará falta ser un virtuoso para llegar a lo más alto, cosa que en la moto sí será determinante. La cuestión es gozar de la naturaleza sobre nuestras máquinas siempre respetando a los demás y el entorno.