Galfer: así se fabrican sus frenos y así los probamos

Galfer: así se fabrican sus frenos y así los probamos

Viajamos a Montmeló, al corazón de la industria de la moto española, para conocer la marca Galfer desde dentro y probar todos sus productos en dos días de diversión máxima.
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Autor:
Chema Calleja
Foto:
Chema Calleja
Publicado el 30/11/2021
Galfer: así se fabrican sus frenos y así los probamos

Muchos ya conoceréis la marca Galfer, pues es uno de los mayores fabricantes de discos de freno y pastillas del mundo, si no el mayor, siendo además proveedor de discos de serie para la mayoría de marcas de offroad europeas.

Fue fundada en 1952 para dar servicio a la recientemente creada Seat, para la que fabricaban tambores y zapatas. Su origen es italiano, ya que la licencia era Fiat de aquellos primeros vehículos, por lo que buscaron expertos que se establecieran en España y hicieran de proveedores de la nueva marca. Así nació Galfer.

Hoy, casi 70 años después, es una de las marcas punteras en fabricación y diseño de elementos de frenada. La clave de éste éxito es que siempre han sido una marca muy ligada a la competición y la totalidad de sus productos de alta gama siempre se testan en competición y por los mejores pilotos del mundo.

Prueba de ello es que son los inventores del disco de freno Wave, tan conocido y que tanto ha mejorado la frenada en las motos de campo, y el cual es una patente de Galfer, pese a que otros fabricantes también lo ofrezcan.

Además de discos de frenos también producen algunas de las mejores pastillas de freno que el dinero puede comprar y ésto es el fruto de tantos años de prueba y error. La “receta” de una pastilla de freno es la clave de su éxito. Y teniendo en cuenta que incluye más de 20 ingredientes, muchos de ellos secretos, se hace muy complicado llegar a las proporciones perfectas si no se ha probado una y otra vez.

Así Galfer fabrica pastillas de freno de todos los tipos, orgánicas, semi metálicas y sinterizadas para todo tipo de motos, ya sean scooters, de calle o de campo. Estas pastillas se fabrican también en Granollers, desde la mezcla y prensado de los ingredientes, el corte de las chapas base o el “cocinado” de ambas partes para su unión y curado. Todo además se hace de una forma muy artesanal y revisando cada una de las pastillas a mano para que estén perfectas en todo caso. Es algo que nos sorprendió de la fábrica, donde nos esperábamos muchas máquinas, había trabajadores de toda la vida en un entorno muy familiar.

La sección de fabricación de discos está mucho más automatizada, con un corte láser y centros de mecanizado en 3D se les da un acabado perfecto a cada disco. Estos además se realizan en diversas medidas y grosores para satisfacer todas las necesidades del mercado. De la cortadora de Galfer no paran de salir planchas durante las 24 horas del día y 7 días a la semana para abastecer la gran demanda de la marca de más de 500.000 discos de freno al año.

Para finalizar la visita pudimos conocer a los ingenieros que diseñan y testean todos los prototipos que algún día llegarán a la serie. Modelos por ordenador ofrecen datos de cómo cada diseño disipa el calor según su forma, y modelos reales ponen al límite tanto discos como pastillas. Los simuladores de Galfer también trabajan 24h al día exigiendo el máximo de todos sus productos, a veces incluso llegando a destruirlos para comprobar dónde está el límite. Esto nos da una garantía total de que sus productos no van a fallarnos porque ellos ya llevan mucho tiempo poniéndolos al límite.

American Style

Galfer: así se fabrican sus frenos y así los probamos

Tras terminar la interesante visita nos desplazamos al cercano circuito de Roccos Ranch para disfrutar de una exquisita barbacoa y participar en una divertida carrera de flat track. Los hermanos Cardús, gerentes de Roccos nos prepararon una pista perfecta y nos prestaron sus divertidas KLX 140 con las que pudimos ver unas carreras de infarto.

Para esta prueba acudí con nuestro amigo Abraham García y sin lugar a dudas fue el piloto revelación del evento. Sin haber practicado la especialidad nunca, enseguida se puso a ritmo y le tomó el aire al circuito haciendo segundo en entrenamientos, tras nada menos que el multicampeón del mundo de Enduro Steve Holcombe. Con un cuarto y un primero en las carreras fue segundo en la general tras Holcombe, que hizo valer su experiencia y consiguió un primero y un segundo pese a haber caído en la segunda manga. Sin duda una gran noche que recordaremos durante mucho tiempo en la que el significado de diversión encima de la moto cobró su máximo sentido.

Test de material

A la mañana siguiente, todos los periodistas, algunos con más resaca que otros, partimos de nuevo hacia Roccos. Esta vez para probar los modelos tanto de motocross como de enduro de algunas de las principales marcas para las que Galfer fabrica frenos o patrocinan. Estas motos estaban equipadas con varios de los productos de Galfer en distintas configuraciones. Algunas motos montaban discos wave 270 con pastillas, otras sólo pastillas y hasta pudimos probar el novedoso disco de 280mm para Supercross y Raids.

Así teníamos Yamaha, Gas Gas y Kawasaki de motocross, y Beta y Sherco de Enduro. Para probarlas, otra vez los chicos de Roccos pusieron toda la carne en el asador y prepararon su recientemente estrenado circuito de arena a conciencia para la ocasión. Además en esta jornada tuvimos el placer de poder rodar con la Campeona del Mundo de Motocross, Kiara Fontanesi, la leyenda del freestyle Edgar Torronteras, y los pilotos del Team Ausió cómo Nil Arcarons y Eric Tomás.

La conclusión que podemos sacar es que cualquiera de los productos de Galfer mejora al material de serie en mayor o menor medida. Y diréis ¡pero si los discos de serie de mi KTM son Galfer! Sí, pero no son los mejores discos que Galfer puede fabricar ni mucho menos. Las marcas siempre tratan de ajustar el precio de las motos y los discos de serie son de material más fino, 3mm, frente a los 4 y 5 mm que ofrecen en sus productos propios, y además los de serie son de menor medida, 260mm y 220 atrás en el grupo KTM por ejemplo.

Por ello no es muy difícil mejorar este material, y unas simples pastillas Racing ya nos ofrecen bastante mejor frenada. Si a esto le añadimos un disco 270 fijo también mejora la cosa, con un tacto más preciso frente a los 260 originales en motos de enduro. Por otro lado, los discos ranurados mejoran la disipación de calor frente a los lisos, y éstos además los podemos montar en un soporte flotante para la máxima eficacia. Así tenemos un rango de 9 tipos de disco de freno lisos, ranurados y flotantes combinando éstas características, además de modelos lisos especiales para barro extremo, en medidas standard o sobremedida de 270mm y 280mm para los delanteros.

En offroad hay dos tipos de pastillas, las sinterizadas y las racing, siendo estas últimas las que mejores prestaciones ofrecen y las primeras las más económicas sin comprometer unas buenas prestaciones. También, y para poner la guinda al pastel, disponemos de latiguillos metálicos que optimizan la acción de las bombas y mejoran mucho el tacto y la precisión.

Además Galfer ofrece kits completos con estos elementos unidos en una sola referencia para que sea más fácil su compra por los usuarios.

Conclusión

Sin duda Galfer nos ha mostrado ser una marca comprometida con la competición en offroad en todas sus modalidades, con presencia en la mayoría de los Campeonatos del Mundo y ayudando a grandes Campeones a conseguir sus objetivos. Por ello os animamos a que le echéis un vistazo a sus productos, porque por muy poco dinero será una de las mejoras que más notaremos en nuestra moto, además de la seguridad que tener unos buenos frenos nos aporta. Eso sí, cómo dijo Steve Holcombe contestando a una de nuestras bromas: “Los pros no usamos mucho los frenos, pero hay algún momento que sí y ahí tienen que ir bien” Así que si vuestros frenos son Galfer, tras nuestra intensa experiencia, os garantizamos que seguro irán bien.

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