Destacados:
(Extracto de la prueba publicada en ENDUROPRO 47, si quieres saber más de la moto DESCARGA GRATIS la revista).
Las Enducross Réplica de Gas Gas son las piezas más cotizadas de la marca de Salt. Con la mítica versión de la moto de Nambotin (2010) la afición se metieron en el bolsillo un buen puñado de fans y desde entonces han trabajado en estas versiones “pata negra” evolucionadas del modelo de serie.
En esta vida hay que ser realistas y asumir, para bien o para mal, que cada uno tiene un nivel sobre la moto. Si eres de los que monta bien, tirando a muy bien, aunque no seas profesional sigue leyendo; puede que estés ante tu moto ideal. Si eres de los que tiene un nivel aficionado y hace salidas de fin de semana no muy exigentes, tal vez con el modelo estándar tengas suficiente y éste sobrepase tus aspiraciones.
Hacerte con esta versión R supera en 900 euros al modelo de básico. Pero si sabes sacarle su jugo merecerá la pena. Solo con la cantidad de componentes de primera que incorpora ya habrás amortizado ese plus y disfrutarás de lo lindo dando gas a esta montura española.
¿En qué se diferencia de la estándar?
Lo que realmente marca las diferencias con el modelo de serie es el conjunto de suspensiones. Una potente horquilla Marzzochi de 48 mm y cartucho cerrado dan un aspecto brutal a esta EC y si miras un poco para atrás encuentras el probadísimo Öhlins TTX44, garantía de calidad y buena tracción, que trabaja sobre nuevas bieletas de mayor longitud. Este acertado compendio trabaja a las mil maravillas cuando entras en materia. El tacto es duro, sobre todo, en la primera parte del recorrido, pero rodando a buen ritmo notamos una estabilidad y seguridad que va más allá del modelo básico. Lo mismo a la hora de afrontar un obstáculo, piedra o tronco considerable. Es aquí cuando aparece una sonrisa en tu cara al saber que la inversión por tener esta Réplica no ha sido en vano. Una vez más las diferencias que marca el Öhlins son notables aguantando con nota cuando se le exige de verdad.
El escape completo FMF también es propio de esta R y nos da un rugido peculiar de la marca y una respuesta redonda en medios y altos. El resto de componentes realmente aportan robustez y belleza estética pero dinámicamente no aportan demasiado. El subchasis es de aluminio y no de plástico, las llantas Excel, manillar Renthal, puños con doble compuesto, cubrecárter sobredimensionado, etc… Un detalle de agradecer son las estriberas regulables que nos permiten adaptar la moto más a nuestro pilotaje.
(Extracto de la prueba publicada en ENDUROPRO 47, si quieres saber más de la moto DESCARGA GRATIS la revista).
Las Enducross Réplica de Gas Gas son las piezas más cotizadas de la marca de Salt. Con la mítica versión de la moto de Nambotin (2010) la afición se metieron en el bolsillo un buen puñado de fans y desde entonces han trabajado en estas versiones “pata negra” evolucionadas del modelo de serie.
En esta vida hay que ser realistas y asumir, para bien o para mal, que cada uno tiene un nivel sobre la moto. Si eres de los que monta bien, tirando a muy bien, aunque no seas profesional sigue leyendo; puede que estés ante tu moto ideal. Si eres de los que tiene un nivel aficionado y hace salidas de fin de semana no muy exigentes, tal vez con el modelo estándar tengas suficiente y éste sobrepase tus aspiraciones.
Hacerte con esta versión R supera en 900 euros al modelo de básico. Pero si sabes sacarle su jugo merecerá la pena. Solo con la cantidad de componentes de primera que incorpora ya habrás amortizado ese plus y disfrutarás de lo lindo dando gas a esta montura española.
¿En qué se diferencia de la estándar?
Lo que realmente marca las diferencias con el modelo de serie es el conjunto de suspensiones. Una potente horquilla Marzzochi de 48 mm y cartucho cerrado dan un aspecto brutal a esta EC y si miras un poco para atrás encuentras el probadísimo Öhlins TTX44, garantía de calidad y buena tracción, que trabaja sobre nuevas bieletas de mayor longitud. Este acertado compendio trabaja a las mil maravillas cuando entras en materia. El tacto es duro, sobre todo, en la primera parte del recorrido, pero rodando a buen ritmo notamos una estabilidad y seguridad que va más allá del modelo básico. Lo mismo a la hora de afrontar un obstáculo, piedra o tronco considerable. Es aquí cuando aparece una sonrisa en tu cara al saber que la inversión por tener esta Réplica no ha sido en vano. Una vez más las diferencias que marca el Öhlins son notables aguantando con nota cuando se le exige de verdad.
El escape completo FMF también es propio de esta R y nos da un rugido peculiar de la marca y una respuesta redonda en medios y altos. El resto de componentes realmente aportan robustez y belleza estética pero dinámicamente no aportan demasiado. El subchasis es de aluminio y no de plástico, las llantas Excel, manillar Renthal, puños con doble compuesto, cubrecárter sobredimensionado, etc… Un detalle de agradecer son las estriberas regulables que nos permiten adaptar la moto más a nuestro pilotaje.
Relacionados