Entrevista Colton Haaker: distinto a los demás

- Estás recién llegado de Estados Unidos. ¿Constituye realmente un handicap el vivir en América a la hora de afrontar este certamen?
- «Con seguridad todo resulta más difícil, por lo que trae consigo el hecho de viajar de un continente a otro. Pero disfruto mucho estando aquí; siempre es más divertido correr en Europa que quedarme a entrenar en casa».
- Para que te conozcan mejor los aficionados españoles, vamos un poco hacia atrás:¿a qué edad comenzaste a montar en moto?
- «A los siete años».
- ¿Y cuál fue tu primera moto?
- «Una Honda 50».
- ¿Pero qué especialidad practicaste primero?
- «En realidad, yo simplemente empecé montando, sin más. Salía con mi padre todos los fines de semana y allí donde iba él, yo iba. Hacíamos pistas, trialeras… de todo un poco».
- Tú has competido en diferentes modalidades del «off road». ¿Qué es lo que más te gusta de cada una?
- «Me gusta todo, realmente. Trial, enduro, motocross, supercross… porque lo que de verdad me atrae es empujarme a mí mismo hasta el límite, independientemente de la especialidad».   
- ¿Te gustaría probar suerte en certámenes como el Mundial de Enduro?
- «Sí, por supuesto. De hecho, voy a intentar correr algún Gran Premio este año. Veremos si es viable».
- Y carreras como el Dakar, ¿lo ves atractivo?
- «Pues no, en absoluto. Nunca me ha interesado una carrera en la que se tiran veinte días corriendo ¿o cuántos, quince? A mí lo que me atrae por ahora es el aspecto técnico del pilotaje, no la resistencia. Tal vez cuando tenga más de treinta años piense de otra forma y me meta más en eso».

- En tu noveno asalto a los X Games, este año has debutado con una snowbike, consiguiendo medalla de bronce.¿Qué tal la experiencia? ¿Cómo se pilota un cacharro de ésos?

- «Bueno, resulta tan distinto que yo ni siquiera considero las snowbikes verdaderas motos. Me divertí y estoy satisfecho de haberme traído una medalla, pero es otra historia, ya sabes, el frío, la nieve… te pones un montón de ropa y sigues teniendo frío…».
- ¿Y tienes muchas motos en casa?
- «Sí, son unas cuantas, y entre ellas, una Gas Gas de trial».
- Dos y cuatro tiempos entonces. ¿Qué prefieres?
- «No tengo preferencias al respecto. Cualquier moto puede ser una buena moto, al margen del tipo de propulsor».
- ¿Cuál es tu verdadero punto fuerte como piloto?
- «Mmm… probablemente, mi intensa dedicación a este deporte. Eso hace que en situaciones de especial presión
pueda dar siempre un poco más de mí. Mira el año pasado, cuando en la última prueba nos jugamos el título de superenduro, pude sacar algo más de mi recámara porque detrás había un plus en dedicación, en determinación, en todos esos años de preparación que me han convertido en lo que soy».
- ¿Cómo es tu rutina de trabajo durante la pretemporada?
- «Ante todo, para mí la pretemporada significa, más que un trabajo rutinario, un par de meses en los que puedo mejorar determinados aspectos de mi pilotaje, algo que resulta imposible cuando te hallas en plena temporada, porque estás viajando, estás cansado, estás sometido a presión…». 
- Háblanos un poquito del que está siendo este año tu rival más peligroso en superenduro, Alfredo Gómez…
- «Oh, Alfredo es un tío estupendo. Me llevo muy bien con él, bueno, y con todo el mundo en el Mundial. Como piloto, está a un nivel extraordinario, y no solo en superenduro; mira cómo va en las carreras extremas».
- Nos resistimos a terminar esta entrevista con Colton sin antes preguntarle por su otra gran pasión, ya sabéis, el vídeo… No va a parar en todo el día de «darle al gatillo», grabando en boxes, en la firma de autógrafos, en carrera, camino del hotel…
- «Es algo nuevo para mí, el inicio de un nuevo aprendizaje, que no sé a dónde me va a conducir. Pero lo importante no es a dónde llegue con esto, sino lo que disfruto aprendiendo. Es algo parecido a cuando hace veinte años empecé a montar en moto. Nadie habría dicho entonces que me convertiría en lo que soy hoy».

No hay tiempo para más; a Colton le reclaman ya para asistir al briefing de pilotos y toca recoger su cámara de vídeo y prepararla para nuevas tomas, potencialmente virales… Sobre su futuro o un eventual cambio de actividad profesional en su vida, solo una cosa clara: «vivo el día día y no pienso mucho en ello. Lo que sí es cierto es que, como poco, un par de años más si seguiré dedicándome a fondo al superenduro y y el endurocross».