La publicación digital del enduro y motocross
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30/10/2019
30/10/2019
La joven, pero experta, deportista natural de Cercedilla ha completado la campaña 2019 de trial nada menos que con cuatro podios en el Campeonato del Mundo individual, en el que ha concluido tercera; clausurándola con el título mundial por equipos logrado con la selección española RFME en el Trial de las Naciones femenino, en Ibiza.
Y eso que Sandra -que estrenaba moto TRS Raga Racing 2019 de 280 c.c.- apenas pudo preparar su asalto al mundial, pues aún convaleciente de una lesión de clavícula tuvo que acudir a la doble competición de apertura, en Japón, donde debutó con un sorprendente segundo lugar. Después, se subió al podio de Portugal, Francia y de La Nucía (Alicante), donde concluyó el certamen.
En la competición por equipos de países, Gómez Cantero logró su quinto título mundial de trial con la selección española (que lleva ocho), compartiendo formación con las catalanas Berta Abellán y Neus Murcia. España se impuso a la campeona en título, Gran Bretaña, cuya líder era la pluricampeona mundial Emma Bristow; y a Noruega. El combinado español sólo penalizó 3 puntos en la competición, por los 10 de las británicas y los 18 de las escandinavas.
Sandra se encuentra en su decimoséptima temporada en competición de trial, decimotercera en la alta competición internacional, pese a tener solo 26 años de edad, y suma a esos cinco cetros mundiales, logrados en 2008, 2011, 2012, 2017 y el presente año; otros cinco subcampeonatos por equipos.
Atesora casi una veintena de podios finales mundiales, entre individual y por equipos; 2 subcampeonatos y 4 terceras plazas en el campeonato del mundo de trial individual, la última materializada a finales de septiembre de este mismo año. En el ámbito nacional, Sandra también ostenta dos títulos de campeona de España de trial.
La madrileña comenzó a competir en trial regional junto a su padre y su hermano, Mariano y Alfredo. Con solo 10 años debutó en la Copa de España de Trial Femenino acabando cuarta clasificada; y cuatro años después ya estaba entre las 15 mejores de Europa. Siendo cadete formó parte del equipo nacional que ganó el mundial de trial por equipos en 2008.
¿Qué valoración haces de tu temporada de trial 2019?
“Sin duda, muy positiva. Para empezar, cambié de moto a TRS, y siempre lleva tiempo adaptarse y lo hice muy deprisa. Para colmo, al principio, cuando estaba muy fuerte, me rompí la clavícula, justo antes de Japón y no me permitió correr ninguna carrera del Campeonato de España, para ir preparada al mundial. Así que, arrancar con el segundo puesto inicial de Japón tras un invierno y pretemporada cuestionables -apenas competí en una prueba del regional madrileño-, cuando no sabía cuál podía ser mi sitio; está muy bien. Tras el primer día de Japón me sentí muy fuerte. El resto del año he podido preparar mejor las otras carreras, con muy buenas segundas vueltas sobre las zonas, arreglando lo que fallaba en las primeras”.
¿Cómo ha sido tu adaptación a la TRS y qué mejoras has notado?
“Me ha sorprendido mucho, para bien, que es una moto muy estable. Gracias a esa estabilidad quizá se ha equilibrado las horas que me han faltado de entrenamiento. Es una máquina con mayor aplomo, diría que va más por el suelo, en consonancia con mi estilo, y en lo que más puedo fallar, en saltos o en rodar con rueda levantada, ahí me ayuda mucho; es ligera y se levanta bien pero es muy fácil de dirigir”.
¿Cómo compaginas entrenamientos y asistencia a competiciones de trial y hard enduro en el mismo calendario?
“Pues, realizando una pretemporada válida para ambas modalidades y añadiendo esquí, que también me gusta. Esta temporada quería ganar el mundial de trial pero también hacer todas las pruebas posibles de hard enduro. Buscaba que los entrenos fueran de mucha calidad, afinando durante cinco horas, el tiempo de una competición de trial. Entrenos muy concentrados en tiempo y de manera cotidiana. Gano fortaleza y resistencia en las pruebas de enduro, y he de entrenar agilidad, equilibrio y explosividad para el trial que, a su vez, también me sirve para el hard enduro”.
¿Cuál es tu visión actual del trial femenino a nivel mundial?
“El de este año ha sido de los campeonatos en que más me he divertido, con muchas pilotos muy juntas, y un nivel muy alto que sigue subiendo. Quitando a Emma Bristow, que es la más mayor, y luego yo, las demás son más jóvenes por lo que, creo, que el nivel seguirá subiendo. Por ahora, España está más fuerte, aunque Gran Bretaña aprieta”.
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