Hans Corvers: Pasión y ética del trabajo

Hans Corvers es el jefe de equipo del Monster Energy Yamaha Factory en MX2 y, tras Matterley Basin y Valkenswaard, ha logrado poner entre las cuerdas al todopoderoso Red Bull KTM Factory Team.

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Redacción EnduroPro
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Yamaha Racing
Fecha03/04/2020
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fecha03/04/2020


Construir un equipo de Gran Premio no es fácil. Para tener éxito, necesitas tener la gente adecuada y una correcta conducta de trabajo. El empresario belga Hans Corvers lo ha demostrado con su equipo Monster Energy Yamaha Factory MX2 al desafiar al equipo más laureado de la categoría, el Red Bull KTM Factory Team, que ha ganado 11 de los últimos 12 campeonatos MX2.

No se trata de estar en el punto de mira de Corvers, sino de construir una combinación ganadora, y con sus dos pilotos, Jago Geerts y Ben Watson, tiene una gran oportunidad de dar a Yamaha su primer éxito en la clase MX2 desde 2007, cuando Antonio Cairoli ganó el campeonato MX2 bajo los colores de De Carli Yamaha. Corvers se enamoró de este deporte a una edad muy temprana e incluso corrió a nivel de Gran Premio.

Monster Energy Yamaha Factory

"Estuve corriendo como amateur en 1979 hasta 1980 y luego en 1981 fui a la federación belga, donde corrí en la clase Junior 125cc en 1981. Posteriormente, en 1982 y 1983 el Nacional 125cc, luego participé en el Internacional 125cc en Bélgica, y también el primer Gran Premio en 125cc en 1984. Estuve pilotando con pilotos de la talla de Dave Strijbos, John Van Den Berg y muchos otros. En 1985, 86, 87 corrí en los GG.PP. solo en 125cc. Después puse en marcha mi empresa y volví a correr con los amateurs, donde estuve varios años compartiendo cartel con ellos en Europa”

Corvers recuerda muchas de las razones por las que se enamoró del motocross, cuando era niño, cuando era adulto corriendo al más alto nivel, o cuando veía las leyendas del deporte como fan. La pasión que viene del dueño del equipo belga no es algo que se pueda comprar, se lleva en la sangre.

"Se lleva en la sangre. Tenía siete años cuando empecé a montar un Italjet. Además, donde crecí, a pie de la montaña en Paal, era vecino de Marnicq Bervoets (director del equipo) que vivía al otro lado de la montaña. En esa cima, durante los años 70, había una pista muy bonita. Todos los mejores pilotos corrieron allí, Joel Robert, Heikki Mikkola, y Sylvain Geboers. Tan pronto como oímos las motos, cogíamos nuestras bicicletas e íbamos a verlas. Yo siempre monté una Suzuki, y después de mis dos últimas temporadas como profesional en 1997, Yamaha me quería sobre una 125cc y pretendían que levantara una estructura. Empecé el equipo y le di el nombre de Kemea, que en holandés es Kom er maar achter mij aan (ven y trata de atraparme)."

Una de las cosas en las que Corvers cree, es dar a sus pilotos todo lo posible para hacer el trabajo, y como dueño del equipo, sabe que darles esa confianza solo cimentará la confianza entre ellos.

"Intentamos que nuestros chicos tengan una mentalidad fuerte, diferente; y que se formen como pilotos a partir de ello, aunque solo estén unos meses con nosotros. Tienen que ser autodidactas, pero al mismo tiempo saber que cuentan con el apoyo de todo el equipo. Los que estamos tras el telón trabajamos muy duro y los pilotos también tienen que dar el callo para alcanzar los objetivos, de lo contrario es una pérdida de tiempo".

Ahora, con Geerts justo en el fragor de la batalla por el campeonato MX2, Corvers sabe que para vencer a los mejores, hay que ser el mejor. Bajo los colores del equipo oficial de Yamaha esta temporada, el objetivo de traer a casa un título mundial de motocross no ha hecho más que avivar la llama dentro del equipo.