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La piloto de GasGas contrajo la enfermedad de Lyme causada por la picadura de una garrapata y actualmente está siendo tratada con antibióticos. No obstante, tomará la salida del Rally Dakar el 3 de enero.
El malestar que ha estado sufriendo Laia Sanz en los últimos días no se trataba de un caso de Covid-19, sino que tal y como la propia deportista ha revelado en sus redes sociales, sus problemas fueron causados por la enfermedad de Lyme, una infección bacteriana que se contrae por la picadura de una garrapata.
“Después del confinamiento me empecé a encontrar mal con síntomas bastante raros. Aunque costó encontrar la causa al final me diagnosticaron la enfermedad de Lyme, causada por la picadura de una garrapata. Ahora me encuentro muy contenta de estar en Dubái, entrenando con el equipo, aunque todavía sigo con antibióticos, pero muy contenta con la mejora", ha confesado Laia, quien está superando una enfermedad que, en España, no es nada frecuente.
Sin embargo, pese a este contratiempo, no interferirá en sus planes de correr su undécimo Dakar, a partir del próximo 3 de enero. "Quiero agradecer al equipo, a los patrocinadores, por apoyarme siempre, por entender la situación. Y sobre todo a mi gente cercana por la paciencia. Sé que no es la mejor manera de preparar un Dakar, pero voy a dar los mejor de mí como siempre. Nos vemos en enero", añadió en su mensaje.
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