Enduro en Cerdeña

Cerdeña, reserva del Enduro

Tener la libertad de hacer enduro sin preocupaciones legales es un lujo. Pero si además puedes hacerlo en un entorno natural de paisajes espectaculares lo es aún más. Y si a esto añadimos la disponibilidad de poder elegir rutas de auténtico Hard Enduro ya se convierte en un auténtico paraíso.

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Autor:
Rodolfo Martínez
Foto:
Enduro Cerdeña
Publicado el 02/12/2019
Enduro en Cerdeña

Cuando salimos con nuestras motos de enduro siempre tenemos un porcentaje de nuestra cabeza pensando en las consecuencias que podríamos tener si nos da el alto cualquier tipo de autoridad. Los menos analistas no le darán vueltas al asunto, pero los más comedidos muchas veces lo pasan mal en determinadas situaciones por saber que, ante una ley un tanto absurda, están cometiendo una ilegalidad.

La sensación de poder montar sin ese pequeño pensamiento es una sensación extraordinaria ya que tu mente se evade totalmente de la realidad cotidiana y te permite disfrutar del aquí y el ahora al 100%. Esto hace que podamos charlar distendidamente, descansar en cualquier lugar, parar en poblaciones a comer tranquilamente, aventurarse en sitios desconocidos…

Estas sensaciones son un privilegio que no existe en todos los lugares, pero sí tienen en la isla italiana de Cerdeña. Aquí la normativa permite la circulación de vehículos a motor y la empresa Tour Enduro Cerdeña dispone de todo lo necesario para disfrutar el 100% de nuestro deporte.

El entorno

El primer punto de tener la legalidad practicando nuestro deporte es algo extraordinario, pero es que el segundo punto, el entorno del que disponen, lo es aún más. Su base de operaciones está situado en Orgosolo, en el centro de la isla, rodeado por cientos de kilómetros cuadrados de montaña, con formaciones rocosas de todo tipo que conforman el Supramonte, una cadena montañosa que recorre Cerdeña del centro al este de la isla. Además forma parte del entorno también la zona de Montes, un paraje de bosques centenarios espectacular, que configura toda la zona de juegos Tour Enduro Cerdeña.

Como podéis imaginar, en un entorno de estas características -en el que además no hay prácticamente extensiones de terreno planas y hay escasas poblaciones-, nos encontramos con mil rincones naturales con los que disfrutar de una moto de enduro, y donde podemos elegir tanto encontrar nuestros límites físicos y técnicos en jornadas de Enduro Extremo como disfrutar relajadamente de rutas de caminos rotos con cortafuegos y paisajes. Teniendo también la opción de enduro tradicional, claro. Aquí todo es posible.

Durante los días que estuve allí el tiempo no acompañó, ya que el cielo estuvo cerrado y tuvimos mucha niebla, pero sí tuvimos suerte ya que no nos llovió subidos en la moto, lo que dejó el terreno en unas condiciones perfectas. Y es que las características del suelo de toda la zona hacen que absorba muy bien el agua y, aunque diluvié (como fue la noche de mi llegada) el terreno siempre está en un estado ideal.

Los guías

El equipo que conforma Tour Enduro Cerdeña, liderado por Marco Falconi, es capaz de diseñar el recorrido acorde a las expectativas y nivel de cada grupo, ya que podemos reservar un guía por grupo o unirnos a grupos ya hechos. Yo os recomiendo que hagáis un grupo propio para vuestro viaje ya que podréis elegir el recorrido a medida y disfrutar de la experiencia al 100%. De esta manera podremos elegir un tipo de ruta por día, por ejemplo, o variar de dificultad durante la misma jornada, adaptando el recorrido al nivel que queramos.

Y es que los guías que componen el equipo de Marco -Salvatore, Samuele y Carlo-, además de conocer la zona palmo a palmo, tienen nivel como para llevar al límite a todo el que se atreva, tanto en velocidad como en dificultad -han corrido la Erzberg así que saben lo que es el enduro extremo de verdad…- y lo que es más importante, saben modular esta dificultad para hacer que todo sea una experiencia agradable, dando la dosis que necesita cada uno para acabar completamente satisfechos sin sentirnos sobrepasados; de hecho, también disponen de rutas trail en caso que queramos hacer algo más fácil que enduro convencional.

Las rutas

En los días que estuvimos allí pedí a Marco que me mostrara todo el rango de opciones de rutas, dentro de los días que disponíamos claro, ya que con tanta extensión de terreno las posibilidades son demasiadas como para verlas todas en una semana incluso. El primer día hicimos caminos -con paisajes espectaculares de bosques de todo tipo- y cortafuegos, que allí hay miles; son estrechos con bastante roca, y podemos elegir desde los que se suben fácilmente hasta los que hacen que tengamos que emplearnos a fondo.

En este primer día pudimos recorrer casi 100km y cubrir gran parte de la zona, haciéndonos una idea de la extensión disponible y disfrutando de paisajes espectaculares, rodando la mayor parte del tiempo por sendas de mucha piedra, unas más machaconas que otras. En un par de ocasiones las caprichosas formas me transmitieron la sensación de estar en otro planeta. Recuerdo un momento concreto en que la imagen de tres formaciones de vetas de piedra levantadas cientos de metros de altura, con un lado con un ángulo de 45º desde el suelo con una pared vertical al otro, parecía situarnos en un escenario de una película de ciencia ficción.

Lo mismo me ocurrió en otro punto, donde circulábamos por las piedras del lecho de un río seco excavado en la roca, rodeados de árboles en las paredes laterales agarrados con sus raíces a la roca, y a medida que avanzábamos se iba cerrando poco a poco cada vez más. Al llegar a la parte más estrecha del barranco comenzamos a subir por un lateral en una senda de pura piedra, que nos llevó hasta la parte más alta, sacándonos del barranco mostrándonos un nuevo valle.

A medio día llegamos hasta Cala Gonone, un pequeño pueblo situado en la costa este de la isla, donde comimos todo el grupo -compartí días con un grupo de 18 suizos y, aunque rodando íbamos divididos en grupos de 6 con uno o dos guías por grupo, allí nos juntamos todos- en un restaurante del puerto seleccionado por Marco, donde nos recibieron a mesa puesta con mejillones y pasta recién hecha. El resto de la jornada después de la comida fue bastante relajado, yendo de vuelta al campamento base por sendas y cortafuegos fáciles a un ritmo tranquilo.

El segundo día comenzamos con contrafuegos de cierta dificultad y poco a poco fuimos complicándonos con secciones de más nivel, aprovechando además los descansos del grupo para hacer algunas subidas extremas, de esas de empiece con piedras y roderas en curva para después gas a fondo en una pendiente entre árboles. En un entorno así todo es posible casi en cualquier momento.

Más tarde llegamos a una sección de enduro extremo que discurría por el lecho de un arroyo. Allí solo fuimos 3, ya que era de 100% Hard enduro, y estuvimos unos 30 minutos hasta que salimos por la parte alta (30 minutos de límite físico…). Cuando salimos de esta zona continuamos por sendas entre árboles y laderas (allí son todo árboles y laderas) y fuimos a un ritmo alto con mucho gas, lo que nos llevó de nuevo hasta Orgosolo. Este día para mí fue la perfección en un día de enduro, ya que tuvimos de todo.
 

Enduro Cerdeña

El tercer día solo pude montar por la mañana ya que tenía que tomar el vuelo de vuelta por la tarde, pero hicimos una jornada de enduro tradicional con sendas un poco más técnicas y rápidas, pero esta vez sin tantas piedras, lo que también nos hizo disfrutar como niños. Además terminamos con una comida en un cabaña con chimenea que tenían preparada a nuestra llegada, lo que puso el remate final a una experiencia de enduro ideal.

En esta cabaña tenían preparados quesos, jamón, embutidos varios, así como unos platos típicos cocinados al fuego y una parrillada de costillas y carne. Todo delicioso y más después de un día de enduro. Y es que dentro de las rutas en Tour Enduro Cerdeña tienen preparado la comida y la cena en sitios cuidadosamente elegidos, siendo gastronomía otro de los puntos fuertes de esta experiencia.

La isla

A toda esta experiencia de enduro en sí, hay que añadir las posibilidades de la isla como playas paradisiacas, parajes naturales espectaculares y, como os he contado antes, la gastronomía, que pueden compaginarse con la moto creando un viaje enduro que roza la perfección.

La parte central de la isla donde se sitúan los recorridos de Tour Enduro Cerdeña, cuenta con extensiones de terreno salvaje de miles de hectáreas, con pequeñas poblaciones diseminadas a decenas de kilómetros entre sí, donde podemos rodar sin ver a ningún ser humano durante horas. Sí fue un continuo el ver vacas y cerdos sueltos por el campo, pasando a escasos centímetros de los animales multitud de veces sin que estos se inmutaran -las vacas, porque los cerdos semisalvajes sí que se iban rápidamente con cierto recelo-. No os exagero diciéndoos que fueron cientos de vacas y cerdos sueltos los que vimos en los 3 días de rutas.

Fue muy curioso también el ver unas tumbas de hace 4.000 años excavadas en la roca, que estaban en medio de la ruta del último día. Pudimos pararnos y verlas de cerca lo que añadió otro punto de sensaciones a esta experiencia.

Además, Orgosolo tiene una historia curiosa de bandidos en siglos pasados y toda la localidad está sembrada de cientos de murales con pinturas curiosísimas. El alojamiento lo podemos elegir en el mismo Orgosolo, donde solo hay un hotel un tanto antiguo y peculiar, o podemos optar por alojamientos rurales en casas enteras o por habitaciones.

En definitiva, el cóctel del condiciones que aquí se reúnen hace que las posibilidades sean infinitas, no teniendo nada que envidiar a Rumanía, pudiendo elegir el nivel de las rutas de enduro a la carta. Solo basta con decirle a Marco lo que queremos en cuanto a nivel de rutas, alojamientos, gastronomía y días disponibles y él creará un viaje a nuestra medida.

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