Hola amigos de EnduroPro.
Este ha sido un mes de mayo bastante intenso con la llegada de la primera prueba del Campeonato del Mundo, la Xtreme Lagares; una carrera que tenía en mente ya que fui el último ganador en 2019, en la última edición que se pudo hacer antes del Covid. Es una carrera muy especial, como ya sabéis, de mis preferidas, en la que siempre estoy luchando por ganar y me gusta un montón el terreno, el tipo de carrera, el formato... Correr en la ciudad de Oporto, la cultura portuguesa, todo es muy especial y al final disfruto un montón y eso también es clave para lograr resultados.
Llegamos allí, preparamos todo, caminamos, probamos la moto… Teníamos un trabajo de pretemporada con Powering OffRoad súper bueno, nos encontramos al 1.000 por 1.000 y debido a una revisión de Covid, los casos subieron de jueves a jueves, justo ese jueves había revisión, declararon zona alerta roja y cancelaron la carrera general porque no podían controlar la masificación de público que pudiera haber en los ríos y los contagios podrían subir aún más. Nos encerraron en la base militar, hicieron un prólogo y nos pusieron a dar vueltas.
Cambió mucho porque si te preparas para jugar al tenis y acabas jugando al pádel, no es lo mismo. Salimos igual a la pista a darlo todo, hicimos unos entrenos más o menos y, menos mal, antes de la carrera del domingo decidieron quitar la puntuación del campeonato para que en vez de ser la primera prueba el Campeonato del Mundo, fuera la Xtreme Lagares como siempre, y eso nos favoreció bastante. Hicimos el fin de semana de la mejor manera, con muchísimo barro, condiciones muy difíciles pero fue divertido.