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Cuando se junta pasión, con tiempo libre… pueden salir cosas muy peligrosas. Esta es la palabra que definiría perfectamente la máquina construída por Jean-paul Dufour, un aficionado francés, junto con la ayuda de Olivier Boutron, mecnánico del equipo Marc VDS MotoGP. La máquina ha sido bautizada bajo el nombre de 700 SRX, y cuenta con un chasis de diseño y fabricación propia, un reparto de pesos al más puro estilo Freddie Spencer y un motor de 700 centímetros cúbicos, 3 cilindros y de 2 tiempos, de origen Yamaha.
Cuenta con una suspensión delantera öhlins FGR, con pinzas brembo de anclaje radial, y unos amortiguadores oleoneumáticos traseros, que si bien son öhlins, no están a la altura de un mono-amortiguador trasero actual, pero el rendimiento del motor demanda un escape artesanal curvado situado en la zona del depósito de gasolina, y este a su vez debe recurrir al espacio que hay debajo del asiento, imposibilitando toda opción a mono-amortiguador trasero. Cuenta con un radiador delantero artesanal de tamaño similar al de un coche, basculante artesanal reforzado tipo banana invertido y carburadores de compuerta plana.
La lógica nos indica que para conducir esta máquina es necesaria cinta americana, si queremos seguir teniendo algún control tras el primer acelerón.
¿Alguna vez has tenido la sensación de que te persigue la muerte? pues con esta moto podrías intercambiar el rol y dejar de ser el perseguido.
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