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5 claves para entender (y querer) la nueva Yamaha R7

La nueva Yamaha R7 ha causado sensación y decepción al mismo tiempo ¿Pero por qué? ¿Por qué se merece que nos detengamos a defender su existencia? Estas claves son las que justifican la nueva deportiva japonesa.

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R. Ruiz
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Autor Foto
Yamaha
Fecha18/06/2021

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El anuncio de la llegada de una nueva Yamaha R7 creó una gran expectación. La prensa del sector comenzó a elucubrar imaginando “la deportiva definitiva”, la máquina que arrasaría en los circuitos. Pero sin embargo, cuando Yamaha la ha sacado a la luz la ilusión de los aficionados se ha desinflado, y es que quienes esperaban una deportiva radical, se han encontrado con una deportiva de iniciación. Pero la R7 puede ser todo un acierto en el mercado, si somos capaces de entenderla, quererla y aceptar las claves de su existencia.

Más de uno ha sentido cierta decepción cuando ha visto la nueva R7 2022 de Yamaha: ¿Esto es una R7? ¿Una moto de 73 CV? ¿En serio?”. Pero por más que muchos se empeñen lo más probable es que Yamaha no haya cometido un error, sino un acierto. Y para darnos cuenta tenemos que detenernos en unos cuantos factores que nos ayudarán para ver la nueva R7 con otros ojos. Otra cosa es, obviamente, que sus detractores busquen otro tipo de moto, pero hoy por hoy, en nuestro mercado, lo más probable es que a la R7 le salgan más novios que haters

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1. Aunque se llame R7, no comentas el error de pensar en la YZF R7 OW-02 de 1999

Esto es lo primero. Yamaha ha utilizado la denominación R7 para hacer referencia a su cilindrada y equipararlas a sus hermanas de motor Yamaha MT-07 y la Tracer 7, pero no porque tenga algo que ver con la mítica Yamaha YZF R7 OW-02 de 1999. Aquella R7 era una moto de carreras, literalmente. Diseñada para correr el Campeonato del Mundo de Superbikes y carreras de resistencia como las 8 Horas de Suzuka, y después Yamaha la homologó para calle y la puso en el mercado en una reducida tirada de solo 500 unidades. Esas R7 son motos cotizadísimas hoy en día, bichos raros difíciles de ver. Pero la nueva R7 2022 nada tiene que ver con ella. Esta denominación, recordando a una de las motos más especiales de la historia de Yamaha, es la que tanta frustración ha creado a los seguidores de la marca.

2. Ya no hay Yamaha YZF-R6

No lo olvidemos: ya no hay Yamaha YZF-R6. Parece mentira pero la Euro5 se la ha llevado por delante. Yamaha no ha visto interesante actualizar su motor para que superase la nueva normativa de emisiones y las Yamaha YZF-R6 han quedado para la historia. Al menos de momento. Solo existe la posibilidad de comprar una Yamaha YZF-R6 RACE, específica de circuito, pero no una R6 con la que circular por la carretera. Eso significaba que en la familia de motos deportivas de Yamaha había un importante salto de la Yamaha R3 a la poderosa Yamaha R1, y era más que necesario introducir un escalón intermedio entre dos mundos tan diferentes. Quizá la nueva R7 sigue estando muy lejos de la R1, pero al menos lo está mucho menos que la R3. ¿Qué tal una futura R9 tricilíndrica basada en la MT-09? Nosotros lo dejamos caer, por si acaso.

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3. Se puede llevar con el carnet A2

La nueva Yamaha R7 es una moto para todos los públicos. O bueno, casi todos. Al menos para aquellos clientes que ya tienen 18 años y que se han sacado el carnet A2. La potencia del bicilíndrico de la R7 puede ser limitada para cumplir con las exigencias del carnet A2 y, después de dos años, volver a la deslimitación para disfrutar su motor al completo. Y es que aunque Yamaha haya decepcionado a unos cuantos por ofrecer una deportiva de escasa potencia (tiene 73 CV y la Aprilia RS660, su más directa rival, ofrece 100) en realidad la jugada estratégica va mucho más allá de los CV. La R7 lo tiene todo para convertirse en la primera deportiva de muchos, su diseño cautiva a cualquiera, y pertenecer a la familia YZF puede convencer más que una potencia mayor o menor. Si tienes el carnet A y llevas muchos años en esto de las motos quizá no lo veas así, pero ¿y si estás empezando? Quizá esta R7 es la oportunidad que estabas esperando.

4. Monta uno de los motores más divertidos de Yamaha

Eso es así. Desde el momento en el que probamos por primera vez la Yamaha MT-07, hace ya muchos años, sabemos que Yamaha dio de lleno en la diana con este motor bicilíndrico CP2 de 689 cc. Su alto par hace que la sensación de aceleración llegue desde los primeros metros, y si eso lo combinamos con su ligereza, y con la de todo el conjunto, la combinación se traduce en plena diversión. La nueva R7, con todo su carenado y demás, es 4 kilos más pesada que la MT-07, quedando sus 188 kilos un poco por encima de los 184 de la naked. Pero eso no es problema para un propulsor que en el caso de la R7 viene acompañado por un embrague asistido antirrebote que, además de dejar una sensación más ligera en la maneta, ofrece cambios de marcha más suaves, evita el exceso de revoluciones del motor y el salto de la rueda trasera en las reducciones más bruscas.

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5. Es una deportiva asequible

La Yamaha R7 2022 es una moto asequible. O al menos sabemos que lo será, porque de momento Yamaha no ha desvelado su precio en España. Tenemos como referencia el precio en Estados Unidos, que es de 8.999 US$, lo que al cambio serían 7.564 €. Eso no significa que su precio en España vaya a ser ese, pero si tenemos en cuenta que en USA la Yamaha MT-07 cuesta 7.699 US$ (6.471 € al cambio) y que en España su precio es de 6.999 €, ya sabemos que muy desencaminadas van esas cifras. En todo caso, podríamos esperar que el precio de la Yamaha R7 2022 no supere la barrera sicológica de los 8.000 euros. Además, monta componentes bien pensados, funcionales y efectivos, pero no son pata negra, por lo que su precio siempre puede quedar contenido.

Roberto Ruiz
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Roberto Ruiz

R.Ruiz

Comencé sobre dos ruedas en una Bultaco Chispa y antes de terminar la carrera de periodismo ya trabajaba en una revista especializada, donde me formé y empecé a escribir de motos. Formo parte del equipo de Moto1Pro desde hace casi 10 años y procuro aportar todo lo posible desde mi “joven” experiencia.

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