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El de Honda no ha tenido ni mucho menos la carrera que él esperaba en Italia, un circuito en el que Marc ya dominó en el último test celebrado aquí y en el que confiaba en haber podido luchar por el podio.
La carrera comenzó con un pequeño susto para el #93, que después de irse largo en San Donato nada más apagarse el semáforo, estuvo a punto de tocarse con Danilo Petrucci en la segunda curva de Mugello. “El año pasado me quedé cortado y he arriesgado un poco, después casi me toco con una Suzuki... me he descontrolado y por mala suerte he tocado a Petrucci".
Tras la salida, Márquez he encontrado su ritmo, ha pasado limpiamente a Valentino Rossi y ha ido a por Jorge Lorenzo, que intentaba sacar el martillo para dejar atrás a sus rivales. Sin embargo, en la quinta vuelta, Marc perdía el control de su Honda en la curva 10, una caída que en su opinión ha sido "una lástima" porque "no me la esperaba para nada".
Marc ha reconocido que la caida hoy era "difícil" salvarla, y confiesa que tampoco habría conseguido levantar su Honda aunque hubiese tenido más asfalto antes de la escapatoria: "Ni aunque hubiera habido más asfalto en la escapatoria lo habría logrado, quizá habría perdido menos tiempo saliendo de la grava, pero era en bajada y por más fuerza que hice con el codo no se levantó la moto".
Tras ser preguntado por la prensa, Márquez también ha dado su opinión sobre la victoria de Jorge Lorenzo en Mugello: "Por decirlo claro, ha callado alguna boca", ha dicho Marc con una sonrisa. "Se ha sacado un peso de encima, desde luego alguna boca ha callado. Tiene mucho talento, siempre lo he dicho, hace cosas encima de la moto únicas y tiene recursos propios y desde luego ha sido una gran victoria".