La policía en moto francesa, su misión: ¡proteger al Presidente!

La Guardia Republicana francesa posee una unidad de élite que, no solo realiza exhibiciones mostrando un increíble dominio a lomos de pesadas y anchas BMW RT, sino que, entre otras misiones, está encargada de proteger al Presidente de la República Francesa.

Es fascinante ver a 4, 6 o 16 policías en moto realizando la misma cabriola a 10 cm uno del otro, el primero tiene un amplio campo de visión, pero los otros apenas ven nada y deben fiarse ciegamente (nunca mejor dicho) de la habilidad del compañero que va delante. El resultado es una especie de serpiente serpenteando (valga la redundancia) entre conos.

La Guardia Republicana en moto

El límite es lo que se denomina El Carrusel, compuesto por 16 motos. Digamos lo obvio, cuantas más motos participan, más difícil será realizar la maniobra con éxito. Para las cabriolas más complicadas el proceso de aprendizaje se realiza primero a pie, luego en bici y por último con las BMW RT.

Hay un líder de equipo que lleva la iniciativa de los movimientos, con el resto de los componentes a su estela. Siempre al ritmo de la música que, de alguna manera, marca la velocidad del ejercicio.

Además de proteger al Presidente de la República Francesa, la Guardia Republicana realiza otras misiones, como el traslado de prisioneros y cualquier otra labor donde se requiera un equipo de élite en moto.

Los miembros suelen estar en el escuadrón acrobático cinco o seis años, para después pasar a otro cometido y así hacer hueco a nuevos miembros, en especial a los más jóvenes. Cada miembro debe ser capaz de trabajar en equipo, siendo conscientes de que forman parte de un todo, una especie de complicada cadena, en el que cada policía es solo un eslabón.