Prueba casco HJC RPHA 90S: un excelente modular
ASPECTOS POSITIVOS
ASPECTOS NEGATIVOS
Dentro de la gama superior RPHA del fabricante HJC, este modelo 90S es su mejor modelo modular. Existe también en versión con calota de carbono (por 629 euros en lugar de 479 euros, aunque indicamos los precios oficiales y se encuentran por debajo en comercios) pero hemos probado el modelo normal, que combina carbono y fibra de vidrio en su construcción. El tallaje es el estándar, en mi caso (cabezón) necesito una XL en esta marca (incluso XXL) pero me sorprendió, nada más sacarlo de la caja, que lo esperaba más grande y pesado, al ser modular. Declaran 1650 gramos y el mío (XL) pesó exactamente 1615 gramos. Existe en tallas desde la XS a la XXL y creo que son tres tamaños de calota externa.
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HJC RPHA 90S
El casco está bien equipado de serie, con un mecanismo de apertura muy sólido y de cierre seguro. Dispone de pantalla solar interna, que es de plástico con revestimiento anti-vaho y anti-arañazos, y es bueno señalarlo porque a largo plazo se nota. En la caja nos vienen más accesorios como la pantalla interna pinlock (120), que ya es casi imprescindible, y la del casco viene preparada para montarla en un momento. También una trabajada mentonera y deflector nasal que consiguen un cierre casi hermético para uso en invierno y mayor atenuación del sonido. Al probarlo en plena ola de calor, no los monté, y sí lo hice con una pantalla más oscura que nos enviaron para probarla, como puedes ver en las fotos (normalmente con la solar interior sería suficiente, la verdad). El mecanismo de cambio de pantalla es fácil de uso y seguro, perfecto para poderla lavar desmontada sin problema (¡malditos mosquitos!).
El único punto negativo es el cierre, tipo micrométrico. Soy un absoluto convencido de la superioridad del cierre de doble hebilla: con él el casco siempre queda bien asegurado (no necesita ajuste), y de hecho HJC lo usa en otros cascos suyos que tengo (también RPHA), no sé por qué no en éste. Al menos es una micrométrica metálica. Por último, aunque no tuve tiempo de montarle un intercomunicador, vi que lleva huecos en las orejas y que no es nada difícil desmontar el interior, para eso y para lavarlo.
A prueba
Ya he destacado las cosas más importantes cuando tienes el casco en la mano. Confieso que no soy un fan de los cascos modulares, porque demasiadas veces veo gente que cae en la tentación de usarlos abiertos. Aunque estén homologados en esa posición (cuidado que no todos lo están), tengamos claro que un casco abierto es mucho menos seguro que uno cerrado, y que uno modular, abierto, presenta riesgos extra (más peso en una parte más alta).
Sabiendo eso, y evitando al máximo la tentación de llevarlo abierto en marcha (aunque éste se queda bien asegurado), reconozco que es una ventaja poder abrir la mentonera sin quitarse el casco. Por ejemplo para poder hablar con alguien, pagar en la gasolinera, etcétera. Y también para ponérselo: es mucho más fácil hacerlo con él abierto y luego cerrarlo, que hacerlo como si fuera integral. Y me gusta la sensación de solidez del cierre tanto al abrir como al cerrar.
El casco me resultó cómodo con un ajuste necesariamente “justo” (nunca lleves un casco que te vaya holgado, es normal que apriete un poco los primeros días). Perfecto para poderme poner gafas, por cierto, es algo en lo que hemos ganado mucho los que las necesitamos... En marcha es fácil manipular la pantalla solar y la principal se queda en los puntos intermedios si la quieres llevar algo abierta, sin cerrarse a mediana o incluso alta velocidad (ya depende de la moto, no lo usé con ninguna naked rápida).
Eso será necesario porque aún con las aireaciones abiertas, eché de menos (con bastante calor) mayor flujo de aire interno. En cambio, me sorprendió que era un casco sin ruidos parásitos, de hecho es bastante silencioso, algo importante para la comodidad en tramos largos. La verdad es que mirando atrás, con semanas de uso, es un casco que (quitando el tema del cierre) usas a diario de forma muy satisfactoria: recomendable por la comodidad del modo modular, recordando el consejo importante de no llevarlo abierto en marcha.
Al detalle...
Aunque lo probamos con la pantalla cambiada (oscura para las fotos), la normal es transparente pero la solar interior es un complemento perfecto en días soleados.
Aunque es metálico y con un sistema más seguro de lo habitual, siempre es mejor un cierre con doble hebilla.
Una entrada frontal, una superior y esta salida trasera ofrecen cierto flujo de aire… escaso en verano. La pantalla se puede abrir por puntos y ventila bien, sin cerrarse.
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Apasionado de las motos, los aviones y la tecnología, llevo más de 30 años viviendo "desde dentro" la información del mundo de la moto en los mejores medios: ahora, en Moto1Pro.
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