La publicación digital del motociclismo
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La publicación digital del motociclismo
27/03/2020
27/03/2020
El mundo de la moto tampoco se ha librado del coronavirus. La mayor crisis sanitaria que hayamos visto jamás en nuestro tiempo nos está poniendo a todos a prueba. Incluido al sector de la moto. Y con el fin de preservar la salud de todos los vinculados a este mundo la industria de la moto también ha parado en seco. Así nos lo confirma ANESDOR, la Asociación Nacional de Empresas del Sector de las Dos Ruedas.
Desde ANESDOR quieren transmitir todo el apoyo y cariño a las miles de familias afectadas, directa o indirectamente, por la pandemia del COVID-19. Así como a todos los profesionales que con su trabajo diario permiten que en el actual estado de crisis nuestro país siga adelante.
La salud de todas las personas que trabajan en el sector de la moto está muy por encima de cualquier cifra o resultado económico, por lo que la práctica totalidad de las empresas están ya cerradas. El Estado de Alarma decretado por el Gobierno de España el pasado 14 de marzo provocó la clausura total del mercado, deteniendo toda actividad comercial e industrial.
La prioridad absoluta es mejorar la situación sanitaria en la que vivimos, aunque ello implique un inevitable impacto en el empleo y la economía, donde se ven especialmente afectada la pequeña y mediana empresa. Es inevitable que los resultados empresariales se vean lastrados por esta coyuntura, pero ANESDOR asegura estar trabajando para minimizar los perjuicios que afronta la gran familia de la moto en España.
En un momento en el que el sector de la moto gozaba de una salud especialmente buena, el coronavirus ha atacado a la industria con piedad. Pero ANESDOR nos recuerda que el sector volverá a superar esta crisis como ya se superaron otras en el pasado, especialmente si tenemos en cuenta que en los últimos años cada vez más españoles se desplazan en moto, y esa volverá a ser la tendencia cuando todo pase.
Para defender el sector de la moto, ANESDOR ha abierto canales de comunicación con el Gobierno de España y también con la Comisión Europea a través de ACEM, su homólogo europeo. La prioridad es la búsqueda de soluciones en este entorno de crisis, garantizando siempre la coordinación y atención entre las empresas del sector.
Al igual que ha ocurrido con infinidad de sectores, el de la moto también ha tenido que cerrar a cal y canto hasta nuevo aviso. Y la reacción en cadena no se ha hecho esperar. No solo las tiendas y concesionarios han tenido que cerrar sus puertas por ley, sino que toda la industria que se mueve detrás también ha seguido los mismos pasos.
Justo cuando el mercado español estaba en su mayor momento de bonanza de los últimos años, las cadenas de producción han parado su actividad. Los puntos de venta de motos están cerrados, y la prevención de la salud de los trabajadores ha hecho que las plantas de fabricación de diversas marcas también hayan dejado de producir.
Yamaha no tardó en anunciar la suspensión de producción en sus fábricas de Italia y Francia, así como la Italia MV Agusta hizo lo propio en su planta de Varese. El grupo Grupo Pierer Mobility AG, donde se engloban KTM, Husqvarna y GasGas, también para su producción, en principio, del 30 de marzo al 10 de abril, y lo hará a modo de adelanto de las vacaciones de sus trabajadores, sin que de momento afecte a la distribución a nivel mundial ni al área de repuestos. Ducati, por su lado, también se ha sumado a echar el candado en sus instalaciones, al igual que también se ha visto afectada la producción de BMW en sus fábricas europeas y Harley-Davidson en una de Estados Unidos por un caso positivo. Mientras, otros grupos como Piaggio, mantienen de momento su actividad de forma reducida y bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria.
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