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Los años 70 fueron la década de la contracultura y del individualismo, y así es la R 12 S, una NineT que rinde homenaje a la icónica R 90 S de 1973.
1973 fue un momento especial en la historia del motociclismo, ese año aparecieron cuatro modelos que hoy ya son icónicos. Un adjetivo manido pero que en este caso no es ninguna hipérbole. Nos referimos a la Honda CR125, Laverda 1000, Yamaha RD350 y BMW R 90 S. Cuatro motos que no podían ser más diferentes pero que estaban unidas por una característica: ser tan atractivas que hoy las cuatro formarían una maravillosa colección de clásicas. Ah, y casualidades de la vida, tanto la BMW como la Laverda venían en color naranja KTM.
Esta introducción viene a cuento de la nueva BMW R 12 S que rinde homenaje a la BMW R 90 S de 1973, cuya S (Sport) no dejaba lugar a dudas de que estábamos ante un modelo deportivo. El diseño de la R 90 S se lo debemos a Hans Muth (el hombre que creó también la Suzuki Katana), uno de los grandes artistas del universo motociclista. A veces se acusa al diseño teutónico de ser conservador y hasta casi aburrido, dos características que nunca han tenido las motos que han salido del lápiz de Hans Muth.
La versión de 1975, con su color Daytona Orange, es una de las motos más reconocidas de la década de los 70, un mundo donde no había móviles, internet, Netflix ni Black Friday… Ahora BMW llama a este legendario color, Lavaorange Metallic (Naranja Lava). La imagen se completa con un cupolino a imagen del modelo original y una tapa de asiento que le da el aspecto de monoplaza.
Viendo la BMW R 12 S de 2025 nos viene a la mente las gestas de Helmut Dähne en la Isla de Man con su inconfundible mono rojo con rayas blancas. Por no hablar de la moto con el dorsal 83 con la que el excéntrico (uno de nuestros héroes) Steve McLaughlin ganó las 200 Millas de Daytona de 1976. La decoración del casco de McLaughlin era puro años 70 y en ella no faltaban las palabras Oh My My inspiradas en una canción de Ringo Star.
La imagen café racer atrapará a cualquiera que tenga sangre en las venas, con ese voluptuoso depósito de gasolina naranja y plata, como el resto de la moto. Dos colores que parecen antagonistas pero, como buenos opuestos, se atraen y complementan. Otro detalle setentañero son las llantas de radios con neumáticos sin cámara.
Un cambio importante es que, a diferencia de la preciosa (y nada exitosa) R NineT Racer de 2017, la R 12 S de 2025 no lleva semimanillares, sino un manillar plano y ancho. Un detalle que será muy bien recibido por los pilotos más veteranos (y menos elásticos). Los espejos en las puntas del manillar es algo que no acabamos de entender, pues la R 90 S no los llevaba así, y no suele ser el mejor lugar para ver con eficacia lo que ocurre a nuestras espaldas.
La BMW R 12 S 2025 es una máquina del tiempo que nos transportará a los convulsos (y maravillosos) años 70 pero en lo que respecta al aspecto técnico es una moto del siglo XXI: IMU, ABS y control de tracción en curva, modos de motor, embrague antirrebote, regulador del freno motor, etc.
BMW España no ha declarado todavía ni la disponibilidad ni el precio de la R 12 S 2025. En Alemania el nuevo modelo costará la bonita cifra de 22 000 euros, pero hacemos hincapié en que se trata del precio en su país de origen, aunque en nuestro mercado no debería variar mucho.
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