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Probamos la Honda CL 500 (A2) en el Wheels&Waves

Nos fuimos con la nueva Honda CL 500 al Wheels&Waves: motos, surf y rock and roll… Es una pasarela de motos de todo tipo y de todo tiempo, donde esta moto encaja al dedillo

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Redaccion Moto1pro
Mariano Urdín
Foto
Honda/Llurba

fecha01/07/2023


En esta edición 2023 hemos asistido a la fiesta Wheels&Wave de la mano de Honda, que ha puesto a nuestra disposición su nueva CL 500, una moto que ya te presentamos estáticamente en el pasado mes de marzo, pero tenía muchas ganas de probar. El lugar del evento está ubicado en el País Vasco franco-español, y las carreteras que transitamos por la costa iban desde Zarauz, San Sebastián, Hondarrivia, Hendaya, San Juan de Luz, Biarriz y Bayona. La verdad es que esta zona es un entorno privilegiado, con un verdor y unos paisajes increíbles, pero tanto verde tiene que tener su precio… ¡allí sí que llueve!. Nos hemos mojado (y no poco) los tres días.

Probamos la Honda CL 500 en el Wheels&Waves

Concurso de personalización Honda “mini”

Además de disfrutar del espíritu y el ambiente tan especial del evento, Honda nos invitó para ver en primera persona el concurso de customización convocado para su gama de mini-motos, entre los distribuidores Honda europeos. Para la gran final de W&W se eligieron siete finalistas, que estaban allí presentes, entre todos los participantes que se habían presentado y todas construidas sobre la base de las “minis” de Honda. Estas finalistas eran dos Dax, dos MSX125 Groms y tres Monkeys. Los diseños han de ser únicos, personales y al gusto del artista, y puedes presentar desde lo más extravagante hasta lo más sutil y elegante. Cada una de ellas es el resultado de la colaboración entre un joven artista y un preparador de motos consolidado. La vencedora saldrá de una votación online en hondacustoms.com que coronará a la mini-moto Honda favorita de Europa.

La representación española estaba presente en la gran final con el proyecto de la artista Coco Dávez y realizada por el constructor/preparador UFO Garage, partiendo de una Honda Dax. Entre los dos han creado un espectacular estallido visual lleno de alegría, colorido y estilo pop, con grandes neumáticos llenos de personalidad. La artista nos dijo que “Formar parte de este proyecto me ha hecho mucha ilusión. Cuando conocí la moto que diseñaría, la DAX 125, enseguida me vino a la mente uno de mis juegos favoritos de la infancia, así que me inspiré en la paleta de colores para dar vida a cada una de las partes y piezas de esta, ya de por sí atrevida, DAX 125.” Cuando nos marchamos se encontraba clasificada en muy buena posición, peleando duramente con la representante portuguesa...

También recomiendo visitar el mercadillo dentro del recinto del W&W: es muy curioso, con accesorios, ropa muy fashion y recambios de motos antiguas, sobre todo de Harley Davidson e Indian, que parece que es chatarra pero lo venden a precio de orfebre. Bueno todo lo venden a precio europeo, pero muy del norte, por ejemplo, una camiseta de algodón con el logo conmemorativo costaba 90 “europeos” (!).

Honda CL 500

Como he dicho tenía ganas de probar esta moto, me hace gracia. En mi humilde opinión es un guiño de Honda a la moda scrambler, con una moto de cilindrada media que se inspira en el estilo de las motos de los años ‘60, de aspecto rutero, manillar alto y asiento bajo, pero parece dispuesta también a abandonar el asfalto ocasionalmente e internarse en alguna pista de tierra. No hace falta que hable mucho de la mecánica de la CL 500, pues está más que probada su eficiencia y fiabilidad: podemos decir que es la referencia de su segmento, lo tenemos en toda la familia CB 500 y también en la superventas CMX 500 Rebel, con la que comparte otros muchos elementos de su parte ciclo.

Aunque es una moto asequible, en ella el diseño tiene mucha importancia: su línea y cada detalle se ha cuidado con celo para conseguir que pase de ser una moto corriente a ser una moto más especial. Para completar el conjunto, Honda ha preparado una completa gama de accesorios con los que equipar y transformar completamente su aspecto y aptitudes, para adaptarla a nuestro gusto y necesidades: es una de las claves de este tipo de motos, disfrutar con el trabajo de la personalización. Hay tres paquetes disponibles, el Adventure, Style y Travel, aunque se puede adquirir cualquier accesorio de forma independiente y combinarlos como desees.

El Paquete Adventure incluye: Guardabarros alto (incluye guardabarros bajo recortado), Protectores de puños, Estriberas rally y Protector de amortiguadores traseros. El Paquete Style trae: Careta del faro, Tapa trasera izquierda, Asiento marrón más mullido pero 30 mm más alto, Adhesivos para las llantas. Y el Paquete Travel incluye: Alforja trasera izquierda (14 l.) y su soporte, Toma de corriente de 12V, Puños calefactables, Maneta de freno ajustable y Protector de depósito. La CL500 llega en cuatro colores: Naranja Energy Candy, Verde Laurel Mate Metalizado, Azul Caribbean Blue Sea Candy y Negro Gunpowder Mate Metalizado.

Tal como esperaba, las sensaciones de conducción que me ha transmitido la CL 500 han sido muy positivas, pues su mecánica, bastidor y sus cotas de medidas, se adaptan perfectamente a la personalidad que marca el carácter de esta moto, dotándola de una gran armonía en todos los escenarios que se presenten. En ciudad se mueve con soltura (el asiento está muy bajo y es ligera), en las zonas viradas que hemos abordado por las carreteras del País Vasco se ha comportado con mucha nobleza. Eso a pesar de que las condiciones climatológicas no nos han acompañado en absoluto, con intensas lluvias y algunas veces bancos de niebla, el estado del asfalto no era el mejor y algunas veces con muy poca visibilidad…

Sus prestaciones generales son las mejores que puede ofrecer un motor ligero y alegre, de lo mejor de su categoría para el carné A2, con 46 CV que tienen que mover 192 kg de peso en orden de marcha, realmente lo hace con mucha solvencia. Por su parte los frenos y suspensiones cumplen bien su labor, aunque no es una moto pensada para llevar a estos elementos al límite.

Conclusión

Creo que la Honda CL500 viene a cubrir un discreto hueco quedaba dentro de la completa gama 500 de Honda, ese que llamamos scrambler. Es una moto con una personalidad indiscutible, pero al mismo tiempo ofrece un abanico de utilización muy extenso, puede ser una compañera ideal para el día a día, divertida para las excursiones de fines de semana y, convenientemente equipada, puede comportarse como una viajera voluntariosa y abnegada, tanto para viajar solo como en compañía, y no pondrá mala cara si en alguna ocasión hay que salir del asfalto y circular por una pista de tierra. Todo ello por 6750 euros y ¡además es una Honda!

Probamos la Honda CL 500 en el Wheels&Waves
Probamos la Honda CL 500 en el Wheels&Waves
Probamos la Honda CL 500 en el Wheels&Waves
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