Moto1pro
Probamos la Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?

Probamos la Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?

La marca del ala dorada llega al mercado naked con una inédita naked bicilíndrica de 92 CV y un atractivo precio: la Hornet 750 de 2023
Probamos la Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Facebook
Twitter
Whatsapp
Honda

25/11/2022


ASPECTOS POSITIVOS

Precio
Motor
Equilibrio

ASPECTOS NEGATIVOS

Imagen poco personal
Suspensiones sencillas
Freno trasero

Cilindrada

755cc

Motor

2 cil. EFI SOHC

Potencia

92 CV a 9.500 rpm

Peso

190kg

Carnet

A2

Precio

7.650 euros

Ver ficha técnica completa

La Honda CB750 Hornet 2023 se vende por 7650 euros y viene a revolucionar el mercado de las naked medias. A lo largo de buena parte del año, el gigante japonés ha estado anunciando la llegada del Avispón y, ¡por fin ha sucedido! Además de su precio, el mayor atractivo de la Hornet es su motor bicilíndrico en línea que viene a competir con la Yamaha MT-07, la Kawasaki Z750 y la Suzuki GSX-8S (otra recién llegada).

Existía bastante expectación por ver cómo iba el propulsor en línea de 755 cc que no solo se monta en la Hornet sino también en la Transalp 2023. Los ingenieros de Honda nos aseguraron que se ha desarrollado de manera independiente y que no es una copia a escala reducida del que utiliza la Africa Twin, sino un producto concebido para la Hornet.

El motor corre de sobra (más que suficiente para que nos metan en la cárcel) pero quizá lo más destacable es su “correr fluido”. La gran baza de este bicilíndrico es su par motor que permite aprovechar el empuje desde bajas y medias revoluciones. No hace falta sacarle los higadillos arriba, y casi nos podemos olvidar de las últimas rpm de la escala del cuentavueltas. La potencia máxima se obtiene a 9500 rpm, lo que no es mucho. Esto permite el empleo del sistema de culata Unicam que ayuda a reducir la altura del motor. Como ya es habitual, el cigüeñal va calado a 270 grados buscando ofrecer unas sensaciones de bicilíndrico en V. En conducción deportiva el propulsor suena de forma grave y en la presentación hicieron hincapié en las horas que se había invertido en este aspecto.

La entrega de potencia es lineal, sin saltos, altibajos o dientes de sierra. En cuanto a las vibraciones, ni están ni se las espera gracias al eje de equilibrado. Manillar, reposapiés y espejos no vibran y se puede hacer uso de los retrovisores sabiendo que vamos a ver una imagen nítida, con independencia de las revoluciones (algo que no todas sus rivales pueden afirmar). La facilidad de conducción se consigue además por un peso ajustado de 190 kg en orden de marcha y un asiento que está a solo 795 mm de altura. A pesar de ser algo más voluminosa que, digamos, la Yamaha MT-07, con mis humildes 173 cm el triángulo formado por asiento-reposapiés-manillar me permitía adoptar una postura natural. La Hornet es una moto fácil que no intimida y hace que te sientas como en casa.

Las suspensiones están taradas tirando a lo blando, lo que comprobamos al rodar por un tramo bacheado por las incomparables carreteras almerienses. El tren anterior está sujeto por una horquilla invertida Showa de 41 mm con 130 mm de recorrido y sin posibilidad de regulación. El amortiguador tiene un recorrido de 150 mm y ofrece 5 posiciones de precarga de muelle. El competitivo precio de la Hornet significa que también hay que, como dirían los sajones, cortar esquinas, y ajustar el equipamiento para que cumpla con el presupuesto. Dicho esto, salvo que se ruede de manera muy agresiva, el conjunto de suspensiones cumple y siempre con un tarado pensado en el hombre de la calle, en la gran mayoría de usuarios.

Los frenos detienen a la bestia de manera eficaz y el ABS no se mostró intrusivo. Quizá en el tren posterior algo más de potencia a la hora de detener la Avispón habría sido bienvenido. Bastan un par de dedos para reducir la velocidad sacándole partido al conjunto de doble disco anterior de 296 mm con pinzas de cuatro pistones y anclaje radial. Las llantas son de 3,5 y 4,5 pulgadas respectivamente, con neumáticos en medidas 120/70-ZR17 y 160/60-ZR17. Los aficionados a la conducción deportiva a lo mejor echarán de menos un 180 por aquello de tener más goma en el suelo en plegadas y curvas rápidas.

El acelerador electrónico funciona de manera efectiva, el tacto del puño permite que el puño transmita al neumático trasero la información necesaria sin que esta se pierda por el camino. La electrónica cada vez tiene más peso y el competitivo precio de la Hornet no significa que no vaya bien servida en este aspecto. Por defecto viene con tres modos de motor ya programados: Rain, Standard y Sport, al que hay que añadir uno llamado User, que es personalizable, es decir, es posible poner a gusto del consumidor los distintos parámetros. Hay tres niveles para controlar la potencia, freno motor, control de par e incluso no falta un sistema de anticaballito, aunque esto último tampoco da la sensación de ser muy necesario en esta moto.

La pantalla de TFT a color de 5 pulgadas ofrece varios formatos para visualizarla de distinta manera, además de poder jugar con parámetros como el brillo o elegir el panel diurno o nocturno. Bajo el bonito sol de Almería se seguía viendo sin problemas la pantalla. Ofrece mucha información sin que se muestre de manera confusa o apelotonada. Basta un vistazo para controlar las informaciones más relevantes como velocidad, marcha engranada y revoluciones. Por medio de Bluetooth hay la posibilidad de conectar el móvil y la interfaz Honda Smartphone Voice Control (para Android e IOS) para gestionar las llamadas, navegación y demás.

El consumo deberá ser moderado, rodando por las sierras almerienses, en un ambiente donde llevábamos el motor más bien alto de revoluciones y sin practicar ningún tipo de conducción “económica”, el panel iba marcando unos 5,8 litros, aunque por supuesto todo dependerá de las condiciones de uso. Honda declara un consumo de 23 km/l (o 4,3 litros cada 100 km) lo que significa una autonomía teórica de 340 km.

Sus 190 kg en orden de marcha, 92 CV y 7650 euros forman una buena tarjeta de presentación, a lo que hay que añadir lo que los responsables de la marca denominan, “el orgullo de ser propietario de una Honda”. La Hornet se produce en la fábrica de Kumamoto en el sur de Japón, por lo que es un producto 100 por ciento japonés (con la ayuda del departamento italiano). Lo que hace todavía más llamativo que la compañía del ala haya conseguido producir este modelo en el país del Sol Naciente para venderlo en Europa a un precio competitivo.

La próxima temporada la pelea en las tiendas y en las carreteras por el título de naked media va a ser encarnizada. Honda juega con buenas cartas y pensamos que será un duro contendiente para sus rivales. Al final, el aficionado será el juez inapelable que elija a la reina de las naked.

Probamos la Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?

La moto al detalle...

Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Asiento

El asiento está a solo 795 mm del suelo y convierte a la Hornet en una moto para todas las tallas. 

Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Frenos

Frenada eficaz a cargo de un conjunto de discos Nissin de 296 mm con pinzas radiales de 4 pistones, aunque el trasero no ayudaba mucho.

Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Instrumentación

Pantalla TFT a todo color de 5 pulgadas con varios formatos de visualización y conectividad al móvil por medio de Bluetooth

Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Motor

La joya de la corona, nuevo bicilíndrico en línea con 92 CV, que destaca por su par a bajo y medio régimen, además de la ausencia de vibraciones. 

Galería de fotos

Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Honda CB750 Hornet: ¿la nueva reina?
Ildefonso García
Ildefonso García

Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.

Relacionados