Prueba Brixton Crossfire 125 XS: juego de niños
ASPECTOS POSITIVOS
ASPECTOS NEGATIVOS
Cilindrada
Motor
Potencia
Peso
Carnet
Precio
Cuando me dijeron que tenía que probar esta Brixton Crossfire 125 XS una sonrisa apareció en mi cara. Llevaba tiempo queriendo probar esta Mini bike para descubrir, por mí misma, lo práctica que es por ciudad y lo divertida que puede llegar a ser en tus trayectos urbanos y semiurbanos.
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Una Mini Bike como esta Crossfire 125 XS para ciudad es un juguete. Sí, porque supone una libertad de movimiento y una agilidad que no te dan motos de otro segmento. La conjunción de ligereza y maniobrabilidad de una moto de estas características la convierten en la aliada perfecta para disfrutar a diario.
Una estética cuidada
Cuando ves de cerca por primera vez esta Brixton Crossfire 125 XS te llama la atención su estética. No deja de ser una scrambler con estilo neo retro pero, al ser una moto tan pequeña parece de juguete. Y vaya si luego lo es. Su estética evoca a las motos japonesas de los 70 y supone una réplica de su hermana mayor, la Brixton Crossfire 500, pero su sencillez la hace grande. Por eso vamos a analizarla...
Debemos de partir de la base de que estamos delante de una moto de 125 cc cuyo precio parte de los 2099 € por lo que no podemos pedir muchos. De hecho, de un simple vistazo nos damos cuenta de que su sencillez parte de su estilo retro sin ningún tipo de lujo.
La XS, que actualmente está disponible en tres esquemas de color: Clockwork Orange, Cargo Green y Backstage Black, cuenta con un diseño retro que llama la atención allá por donde pasa. Pero, si por algo destaca, es por su sencillez.
Qué hay en las piñas encima del mar
Y de esa sencillez vamos a hablar ahora. Esta moto, por su precio, ya indica que no va a destacar por sus avances tecnológicos. Cuando te subes a ella, lo primero que destacamos es su manillar: alto y que además te evoca a momentos de diversión con alguna que otra pit bike.
Los mandos, sencillos. Muy sencillos. En la piña izquierda encontramos, por un lado, el botón que nos sirve para accionar el tipo de luz que quieres llevar, ya sea corta o larga, con una forma ergonómica pero que nos evoca a los años 50. Justo debajo, el botón para accionar los intermitentes que, para volver a su posición original debes mover de manera intencionada, lo que provoca a veces un juego de luces de izquerda a derecha incontrolable hasta que consigues bloquear el botón en su sitio. Y justo debajo, el botón del claxon.
En la piña derecha, con exactamente el mismo sistema que en la izquierda, nos encontramos un botón para seleccionar entre luces de posición o luces cortas, otro para accionar las luces de emergencia y el botón de arranque de la moto.
En el cuadro, poca información, la justa para que esta moto siga siendo un juego de niños. Ni que decir cabe que, en un cuadro de estas características, solo encontraremos, bajo un sistema analógico, la información de las revoluciones a las que va la moto. De manera digital, en una mini pantalla, podremos obtener la información de velocidad instantánea, el nivel de gasolina y los kilómetros recorridos, además del indicador de punto muerto que desaparece cuando se engrana una marcha.
Los espejos, por su parte, son pequeños y encajan perfectamente en la estética de la moto pero, para mi parecer, cuando la moto va revolucionada vibran más de lo que podríamos esperar en un principio.
Vamos que nos vamos
Una vez te subes a esta XS y te haces a la posición de las manos y estudias un poco los mandos como si fuese el repaso de última hora antes de un examen, coges la llave y te dispones a arrancar. La primera rareza se encuentra en la situación del bombín de desbloqueo, que se encuentra en el lateral derecho de la moto, debajo del cuadro. Una vez desbloqueamos la llave, para arrancar la moto, la insertaremos en el frontal, en un bombín que solo tiene dos posiciones: on y off, como siempre, destacando lo sencillo.
Esta Brixton Crossfire 125 XS cuenta con un motor monocilíndrico de cuatro tiempos refrigerado por aire con el que jugamos a través de sus 5 velocidades. Durante la acción de las tres primeras, la moto saca todo su potencial. De primera a tercera las marchas son muy cortas y enérgicas por lo que la entrega de potencia de esta mini bike es mucho mayor a lo que esperabas en un principio, es muy divertida. Pero, pese a que en el cuadro se aprecia que cuenta con un régimen muy exagerado de 16.000 revoluciones, cuando la aguja llega a las 10.000 corta de una manera muy brusca: puede ser inseguro si te pilla desprevenido en plena aceleración, por lo que tendrás que estar concentrado para que no te ocurra.
En cuanto a la potencia, on “solo” 11 CV pero es una moto que pesa 111 kg y si sumamos mi peso, que ahora mismo sobrepaso por poco los 55 kg, nos encontramos un conjunto muy ligero, por lo que durante la prueba la XS “volaba bajito”. Por otro lado, su velocidad máxima declarada son 95 km/h pude ver un 108 en el odómetro, llegando a adelantar a algún que otro coche en autovías de circunvalación.
Si bien, dadas sus dimensiones no invita a su uso en pareja, hemos podido comprobar que se defiende bastante bien con un acompañante aunque, cierto es, que ambas posaderas difícilmente se podrán acomodar en su asiento corrido sin guardar espacio entre ellas, por lo que nos aseguraremos de que tanto el piloto como el pasajero no cuenten con unas dimensiones muy grandes.
Destacando la parte ciclo
Vamos a hablar de una de las partes que más me sorprendió de esta moto. La parte ciclo. Ya no por sus suspensiones, que monta una horquilla telescópica en el tren delantero y un brazo oscilante en el trasero, sino por sus frenos. Frena extremadamente bien. Podría decir que gracias a su frenada combinada, frena incluso más de lo que cabría esperar.
En el tren delantero, la Brixton Crossfire 125 XS monta un freno de disco hidráulico con un disco de 220 mm de diámetro. Detrás, el disco mide 190 mm. Pues la mordida, tanto de uno como de otro, son superiores a la de muchas motos más grandes y con mejores prestaciones que haya probado. El tacto del freno es muy sensible por lo que, incluso sin hacer fuerza, la moto se detiene de manera casi instantánea. Es un aspecto que hay que mimar y al que tenemos que hacernos, poco a poco, porque la capacidad de frenada de esta moto nos puede traicionar provocando un bloqueo (no tiene ABS).
Para agarrarnos al suelo, esta XS monta unos neumáticos de taco rapado de 12 “ que nos ampliarán las posibilidades de diversión.
Como decía, un juego de niños
No nos vamos a engañar, esta moto es súper divertida. Aunque al principio tenía mis dudas, al final la devolví con pena. La agilidad con la que te mueves con ella por entornos urbanos, la ligereza del conjunto y la “alegría” con la que sales de los semáforos, hacen de ella la aliada perfecta para llevártela contigo allá donde vayas.
Lo que sí debemos tener en cuenta a la hora de desplazarnos sobre esta Brixton Crossfire 125 XS es que es una moto con bastante menos envergadura que cualquier otra 125, por lo que somos más pequeños a la vista de los demás y sí sería recomendable hacernos ver con un equipamiento vistoso y colores chillones para que esos enlatados que van dormidos a primera hora de la mañana al llevar a los niños al colegio, nos identifiquen bien a la hora de buscar el hueco en mitad de los atascos.
Esta es tu moto si
Si necesitas una moto ágil para tus desplazamientos urbanos, con la que tanto moverte y buscar el hueco como aparcar sea un juego de niños, con una entrega de potencia en sus primeras marchas sorprendente, lo que te hará volar en las salidas de los semáforos e incorporaciones, con un consumo irrisorio (2,4 litros a los 100.. no está nada mal) y con una capacidad para hacerte pasarlo bien que no esperas… Sí, esta es tu moto.
La moto al detalle...
El cuadro destaca por su sencillez, tan solo podemos apreciar información básica instantánea.
Con una estética acorde al conjunto, en la unidad de pruebas vibraban mucho cuando íbamos a altas velocidades
Lo más top de esta moto pero aquello con lo que más cuidado debemos tener. Sus discos de 220 mm de diámetro delante y 190 mm de diámetro detrás frenan más de lo esperado.
Cuenta con un faro redondo delantero, full LED, integrado perfectamente en la estética de esta scrambler.
Cuenta con un motor monocilíndrico de 125 cc y una potencia máxima de 11 cv.
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Esther Rabadán
Esther Rabadán
Amante de las motos desde que tengo uso de razón, llevo toda la vida sobre dos ruedas. Tras realizar colaboraciones en distintos medios, en Moto1Pro he hecho de mi pasión, mi modo de vida. Curiosa, analítica y muy digital, además de probar motos, coordino la redacción con mano de hierro en guante de seda.
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