Prueba KTM RC 390: pilota con esta deportiva para el A2
ASPECTOS POSITIVOS
ASPECTOS NEGATIVOS
Cilindrada
Motor
Potencia
Peso
Carnet
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Desde que ves la KTM RC 390, no hay duda de que se trata de una moto deportiva cuya estética proviene directamente de la competición. Esta moto para el A2 se inspira en la KTM RC16 presente en MotoGP, y eso le aporta una apariencia más que atractiva.
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Justo hace un año, mi compañero Mariano Urdín acudía a la presentación de este modelo en Italia para conocer todos sus detalles y ponerla a prueba a fondo en su “hábitat natural”: el circuito. Si queréis conocer el comportamiento de la RC 390 en circuito, os invito a que os leáis la prueba del gran Mariano Urdín que podéis encontrar en nuestra web.
En esta ocasión, queríamos conocer la KTM RC 390 en el comportamiento habitual del día a día: tanto en escenario de ciudad como de ruta en carretera.
KTM RC 390
La RC 390 cuenta con un motor monocilíndrico cuatro tiempos y refrigeración líquida de 373 cc. Cuenta con 44 CV de potencia y un par máximo de 37 Nm.
Respecto a la parte ciclo, se actualiza con un nuevo chasis más ligero con el que pierde 1’5 kg respecto a su versión predecesora. Se trata de una estructura multitubular y un subchasis atornillado. También actualiza las suspensiones. Delante lleva una horquilla invertida WP APEX de 43 mm de cartucho abierto y regulable en 30 clics para la compresión y 30 para la extensión. Detrás lleva un nuevo amortiguador WP APEX de pistón dividido ajustable en extensión y precarga. En cuanto a frenos, cuenta con una pinza de freno fija de cuatro pistones de anclaje radial BYBRE combinada con un disco de freno de 320 mm delante y una pinza fija de un pistón con un disco de freno de 230 mm detrás.
Primeras sensaciones
Lo cierto es que, como suelo comentar siempre en otros artículos o pruebas, le doy bastante importancia al tema de la altura del asiento de cara a sentirme ágil en ciudad. Cuando fui a recoger la RC 390, saber que era una KTM me inquietaba un poco dado la altura habitual de sus motos.
Un nuevo usuario del A2 puede tener cualquier tipo de altura o complexión, pero si es tu primera moto, seguro que buscarás sentirte confiado y cómodo con ella en todo momento. Por ello, los 824 mm de altura de la RC 390 la convierten en una moto apta para usuarios que no lleguen al 1’70 m. Yo mido 1’65 m y podía tocar con las punteras de ambos pies el suelo, un poco justa, pero lo suficiente para poder echar el peso hacia un lado en parado y dominar la moto. Además, su bajo peso, 155 kg en seco, facilita mucho las cosas. Especialmente se hace una moto muy manejable en parado, algo fundamental en una primera moto.
Tras “medirme” con ella, la arranqué para proceder a una primera toma de contacto en ciudad. Quedé inmediatamente sorprendida ya que esperaba una moto brusca, con un comportamiento y respuesta más, digamos, "violenta" (deportiva) que en ciudad no me gustaría demasiado, pero lo cierto es que me resultó bastante dócil y progresiva.
En marcha
Como comentaba al principio, el objetivo era probar cómo se comporta la RC 390 en escenarios del día a día. Comencé por la ciudad con serias dudas de si pasaría la prueba, pero lo cierto es que su respuesta suave hizo que comenzara a verla con otros ojos.
La postura, lógicamente, es deportiva. Si tienes claro que quieres una moto de este tipo, el confort no será lo que más busques en una moto pero, de ser así, ya te adelanto que la más cómoda del mercado para el día a día no es. El asiento, que es bastante elegante, es de doble altura, por lo que en caso de llevar pasajero (alguien que te quiera mucho para ir montado en uno tan pequeño), quedaría elevado.
En cuanto a los mandos, cuenta con manetas regulables y semimanillares regulables hasta en 10 mm de altura, por lo que podrás colocarlos en la posición que te resulte más cómodo según el uso que vayas a darle. Los botones e intermitentes están colocados correctamente y, sobre todo, son bastante fáciles de activar. También es muy intuitivo el manejo de la pantalla TFT a través de los botones de la piña izquierda, donde podrás cambiar la pantalla o cambiar los modos.
Podrás elegir, por ejemplo, si quieres mantener el ABS activado (modo road) o desactivarlo de la rueda trasera (modo supermoto). Aunque es opcional, la unidad que hemos probado dispone de Quickshifter, que también se puede activar o desactivar a través del panel de instrumentos que, por cierto, dispone de un sensor adaptativo de luz ambiente para que la pantalla se ajuste automáticamente y puedas tener mejor visibilidad.
También incluye KTM My Ride, un sistema que te permite conectar tu Smartphone a la moto. Para ello, deberás descargarte la app en tu móvil y conectarte a través de Bluetooth.
Al tener un tamaño pequeño y no ser ancha, en ciudad no tendrás problema para aparcar o para pasar entre coches. Y si te gusta que tu moto acapare algunas miradas, pude comprobar que la RC 390 no pasa desapercibida.
Otro punto positivo tanto en ciudad como en carretera son sus retrovisores, que aportan una visión nítida y amplia y se pueden ajustar a la perfección.
Una vez habiendo "callejeado" con ella por la ciudad, me dispuse a ver qué tal iba en carretera. Si bien en los trayectos urbanos pude llevarla de forma suave, al llegar a carretera pude disfrutar de otro tipo de comportamiento, y es que se convirtió en una moto mucho más divertida y con una buena respuesta a cada golpe de gas.
La cúpula protege bastante del viento, por lo que al alcanzar velocidades más altas no se hace incómodo. Fue aquí cuando comencé a utilizar el Quickshifter, y lo cierto es que en cuanto te acostumbras o, más bien, te desacostumbras de coger el embrague, realmente puedes olvidarte de él y hace más cómodos y rápidos los cambios de marcha.
En las zonas de curvas es donde más disfrutas de esta moto, como es lógico. Es altamente ágil, entra muy bien en cada curva y la postura deportiva hace que tu conducción también sea más dinámica, sacando todo el potencial de una moto que se basa en las de competición.
Al finalizar la prueba, con un uso mixto entre ciudad y carretera, el consumo medio fue de 3’5l/100km. La capacidad de su depósito es de 13’7 litros.
Sin duda, la KTM RC 390 es una moto con la que te podrás divertir mucho si tienes el carnet A2 y buscas un comportamiento deportivo. Es una moto a la que te adaptas fácilmente, muy ligera, con buena frenada y ágil, con la que además no notas vibraciones ni reacciones bruscas (incluye embrague antirrebote), por lo que te aporta una gran confianza para experimentar en tus inicios en la conducción deportiva.
Esa capacidad para adaptarse a tu conducción hace que no sea una moto imposible para ciudad, pero no está hecha para ella y se nota. No es muy práctica ni es cómoda para hacer trayectos habituales, aunque cierto es que su tamaño le permite escurrirse entre el tráfico y si tienes que usarla en ocasiones para cometidos urbanos, no te será un problema moverte con ella.
La moto al detalle...
Cuenta con pantalla TFT con sensor adaptativo de luz ambiente
El escape toma el diseño de la RC16 de MotoGP y cuenta con colectores de acero inoxidable con un silenciador de aluminio
El asiento de la RC 390 mejora el confort gracias a una espuma más gruesa y ergonómica, además de contar con un tapizado adherente.
Pinza de freno fija de cuatro pistones de anclaje radial BYBRE junto a un disco de de freno de 320 mm delante y pinza fija de un pistón con un disco de freno de 230 mm detrás.
Lleva un monocilíndrico cuatro tiempos, de refrigeración líquida y 373 cc (hermano del de la popular 390 Duke)
Semimanillares con 10 mm de ajuste de altura
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