Prueba Zontes M310: la revolución llega a los scooter 300

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Un 300 compacto

El Zontes M310, su primer scooter, es un modelo "compacto": no es un "GT" (tienen un modelo de ese estilo en preparación) sino que podríamos casi definirlo como "deportivo". Es corto (solamente 1390 mm entre ejes) y monta ruedas de 14 pulgadas delante y detrás, y su asiento no está alto (760 mm) y por la forma de la plataforma es fácil plantar los pies en el suelo. Es ligero (168 kg en marcha) y la suma de todo eso, más un motor líder del segmento en potencia (sus 310 cc declaran 33 CV) pues lo convierten en un scooter ágil, rápido y divertido. El motor, de alta compresión, lleva dos radiadores: uno pequeño en la quilla y otro algo mayor arriba, donde la visible abertura que le da esa estética tan agresiva.

Pero antes de ponernos en marcha, apreciaremos muchos detalles impresionantes, y algunos únicos, de equipamiento. La pantalla parabrisas, aunque estrechita, es eléctrica (sí): un botón permite  llevarla baja (quizás queda algo baja, pero perfecta para callejear) o alta (algo alta salvo para los de mayor talla). La llave de contacto no es tal cosa sino una pulserita, y el sistema ha mejorado su potencia (a prueba de inhibidores). Además avisa si te la dejas encendida y te alejas, deja aseguradas las guanteras (muy práctico) y en resumen es un lujo. Pero "lujo" es el cuadro y lo que permite tener: presiones de ruedas y ¡hasta su temperatura!  Luego detalles como las piñas de mandos iluminadas, común a otras zontes, ya no te sorprenden... como quizás tampoco el precio, 4889 euros (baúl de regalo de lanzamiento). Muy competitivo.

Ágil y rápido

En marcha esas buenas sensaciones se confirman: el motor acelera mucho, me recordó más a algunos modelos 400 que a los 300 que se supone serán sus rivales, y según el indicador no parecía muy sediento (en torno a 3 litros o algo más "al ataque"), así que los 12 L de depósito darán para buenas tiradas. Los frenos, de tacto impecable (las manetas regulables ayudan) y con un ABS de Bosch perfecto: el neumático delantero chirría antes de que salte el antibloqueo, sobre buen asfalto.

Las suspensiones son tirando a rígidas, y eso ayuda a que sea ágil (cuesta menos moverlo de lado a lado) aunque no llega a ser incómodo, además el chasis es suficientemente rígido como para apreciar buena precisión en curva. Sí, nos divertimos a sus mandos por las retorcidas carreteras de Collserola (alrededor de Barcelona) y solo nos faltó comprobar cuánto da de sí el motor en velocidad punta y qué tal funciona esa geometría tan ágil en vías rápidas. Por cierto que cuesta llegar a rozar, lo conseguí por poco del lado derecho (codo del escape).

Pros y contras

¿Nada que criticar? Bueno alguna cosa suelta a decir verdad: el neumático delantero (un CST SC01) no ofrecía una gran confianza, la pantalla sería ideal en posiciones intermedias de las dos que tiene (o muy baja o muy alta) y sobre todo el hueco bajo el asiento es un poco escaso (cabe un integral pero nada más). Como el chasis tiene una viga alta, no tiene plataforma plana (ni de lejos) así que ese baúl que ahora regalan (promoción lanzamiento) es casi obligatorio en la práctica para llevar cosas y si no queremos llevar siempre una mochila a cuestas.

A cambio es un scooter equipado como pocos (¿o ninguno?), muy bien acabado, realmente ágil y rápido en calles o carreteras, y seguro con esos frenos. Huele a éxito, y estamos deseando ver qué modelos vendrán tras él.