Destacados:
Durante los años 70 y 80 las evolución de las motos fue sorprendente y muy rápida. La tecnología que Japón iba desarrollando marcó las líneas maestras de lo que debían ser las motos, primero de sport turismo y luego las 100 por cien deportivas. Honda marcó el primer hito con la CB 750 Four, una moto que pronto tuvo réplicas entre sus rivales con la Suzuki GT 750 y Kawasaki, que quiso ir un poco más allá, con la Z1 900.
Mientras en España vivimos los años dorados de las marcas españolas con una producción de motos de campo que marcarían a toda una generación de motoristas y que fueron muy bien valoradas fuera de nuestras fronteras. Desde dentro, todavía vivíamos el régimen proteccionista de la dictadura franquista que ponía trabas a la importación de las motos de cuatro tiempos que se estaban popularizando en todo el mundo. Fue la edad de oro de marcas como Montesa, Bultaco, OSSA, Rieju, Sanglas o Derbi, que desaparecerían o serían compradas por los gigantes japoneses en los años 80.
En los años 80 nos dejaron algunas de las mejores motos deportivas de la historia. Ya en los años 80 vimos la primera moto de serie con inyección electrónica, desde Europa BMW entraba en acción e iba más allá de sus legendarios motores boxer para llevar algunos de los adelantos del mundo de las cuatro ruedas al de las dos.
También el mundo de la moto abriría nuevas sendas con la fusión del on y off road, llegaba una nueva tendencia con las grandes motos de trail orientadas hacia en turismo y la aventura sin límites que estallaría en la siguiente década.
La Honda CB 750 Four marca la era moderna de la moto. Con el dinero y la experiencia obtenida con sus motos más pequeñas, Honda se lanza a su primera moto de cuatro cilindros en línea transversal, una configuración que pronto sería adoptada por muchos otros fabricantes. De la moto de 1969 derivarían gran parte de las Honda que convirtieron a este fabricante a lo que es hoy.
Mientras Honda apostaba por el cuatro en línea y cuatro tiempos, otros fabricantes como Suzuki apostaban por otras configuraciones como la de la GT 750 con motor de tres cilindros y dos tiempos. Fue la primera moto japonesa con refrigeración líquida.
Kawasaki tomó buena nota de lo que había conseguido Honda con su CB 750 y su motor de cuatro en línea, que tomó como referencia y mejoró haciendo una de las motos más potentes hasta la fecha. Las motos llegaban ya a los 1000 cc y su velocidad podía superar los 200 km/h.
El origen de las Yamaha RD se encuentra en esta moto de 1972 con motor de dos tiempos y dos cilindros en línea. Yamaha estrenaba algunas novedades como la lubricación directa, sin necesidad de mezclar el aceite en la gasolina, o la admisión por láminas. Ya mostraba un notable comportamiento deportivo.
Benelli puso en producción su moto de seis cilindros en 1973, una arquitectur que permitía hacer una moto casi con ausencia de vibraciones y un empuje muy lineal. La moto superaba los 200 km/h y hasta la llegada de la Honda CBX de 1978 fue la única en tener este número de cilindros.
Mototrans fabricaba Ducati, con licencia, en España. Uno de sus modelos más populares fue la 250 Road, una sencilla moto con motor monocilínidrico de cuatro tiempos que en años posteriores se vendió también con motor de 350. La road a nosotros se nos antoja la antecesora de las Ducati Scrambler actuales.
Mientras que la mayoría de las marcas españolas fabricaba sencillos motores de dos tiempos, Sanglas se especializó en motores de cuatro tiempos y cilindradas más grandes. Las Sanglas se popularizaron porque eran las motos que llevaba la Guardia Civil de Tráfico. Con la llegada de los años 80 Sanglas será absorbida por Yamaha para comenzar su singladura en España.
Los dorados años 70 del off road tuvieron en la Bultaco Pursang MK8 una de las motos de motocross más brillantes de la historia. Toda una pura sangre, una obra maestra que fue pilotada por el piloto americano Jim Pomeroy o por Harry Everts.
Ducati produjo en 1974 toda una carreras clientes con las mínimas concesiones como para poder considerarla una moto de calle. Es la única Ducati en tener un motor bicilíndrico en V a 90 grados con distribución desmodrómica y en este modelo la firma italiana echó el resto en cuanto a sus elevados estándares de manejabilidad y prestaciones. La Ducati 750 SS salvó a la marca de la desaparición.
En la primera mitad de los 70 el auge de las motos deportivas no tenía límites. La Laverda SF 750 fue un claro exponente de ello, las primeras SF son de 1970 y sus siglas hablan de los super frenos que llevaban estas monturas. En la versión de 1974 se equipó un freno de disco que se multiplicó por dos para el mercado americano en el tren delantero. La moto llevaba un motor de dos cilindros en paralelo, refrigerados por aire, u daba una ptendia máxima de 60 cv.
Honda en 1975 lanzó su modelo más avanzado. La primera Gold Wing es este año, todavía con un motor de cuatro cilindros boxer y se montó en la factoría de Marysville, en Ohio; lugar donde se hicieron las Gold Wing hasta 2009. La moto llevaba refrigeración por agua, freno de disco y el depósito de combustible debajo del asiento para llevar el centro de gravedad de la moto lo más bajo posible.
La primera Bultaco Frontera es de 1975, la moto de enduro (antes todo terreno) más evolucionada fabricada por la firma del dedo rampante. Tuvo versiones que partían desde los 74 cc hasta los 370 cc. con motor de dos tiempos refrigerados por aire. Fue la sucesora de la Bultaco Matador. Las Frontera fueron las motos de pilotos como Narcis Casas, Jose María Pibernat, Toni Soler o Joan Riudalbas.
Las BMW R 90 S se produjeron entre 1973 y 1976, eran las motos de turismo de la firma alemana, que seguía confiando en su motor boxer bicilíndrico refrigerado por aire, de incombustible mecánica. Como buena turismo tenía un pequeño carenado que protegía algo del viento a los ruteros de los años 70. La versión de 1976 introducía ya algunas mejoras que darían paso a la siguiente evolución la R 100 S.
España todavía hacía frente con mucha dignidad a las motos que se veían fuera de nuestrs fronteras con propuestas como la OSSA Yankee 500, una de las mejores sport turismo fabricadas por la marca del trébol, que confiaba su mecánica en un motor de dos cilindros y dos tiemops de 488 cc. Pero pronto llegaría la crisis financiera de OSSA a finales de 1977 y la Yankee desapareció en 1979.
Moto Guzzi se caracterizó por su motor de dos cilindros en V montados longitudinalmente, que ha llegado hasta nuestros días. La Le Mans 850 toma su nombre de las míticas 24 horas francesas y se convierte en otro exponente de las sport turismo europeas. Partía de la Moto Guzzi 750S, ahora con un motor de 844 cc. que entregaba 70 cv. de potencia. Estéticamente era inconfundible, también por su pequeño carenado estilo cafe racer.
Para muchos es la primera moto de trail de la era moderna, pero lo que es indiscutible es que Yamaha dio en el clavo con este sencillo modelos monociliíndrico de cuatro tiempos que se presentó conjuntamente con una version de calle, la SR 500. La Yamaha XT 500 ganó el primer gran rallie africano, el Paris-Abiyán-Niza, que fue el precursor del París Dakar. También tuvo mucho empuje entre los motards franceses que eran unos incondicionales de estas aventuras en moto.
Honda no paraba de sorprender al mundo, y con la CBX 1000 lo hizo al hacer toda una bestia con motor de seis clindros y 1.047 cc. La potencia de la CBX era de 103 cv con una aceleración que todavía no se había visto en estos últimos coletazos de los años 70. Este terremoto tuvo réplicas entre los más directos rivales de Honda.
Junto con la Honda CBX 1000, Kawasaki lanzó este mismo año su moto de seis cilindros y altas prestaciones, 120 cv de potencia. La moto alcanzaba una velocidad máxima de 220 km/h y estuvo en producción hasta 1989, siendo el modelo más grande de la serie Z de Kawasaki. La última versión fue apodada como “Legendary Six”.
La Yamaah SR 500 fue otro de los grandes modelos populares de la firma de los diapasones, con motor monocilíndrico de cuatro tiempos similar al de las XT. Lo mejor de esta moto era su inquebrantable mecánica que llegó hasta 1999 en producción. Todavía se pueden ven algunas unidades rodando por nuestras ciudades.
Si la Yamaha XT 500 fue la que inició el trail, la GS fue la que lo hizo en la categoría maxi trail. Los que veíamos desenvolverse por el barro o las arenas del desierto el mastodóntico boxer no alcazábamos a ver, en esa época, el alcance de lo que sería un modelo salvó los números de la división de motos de BMW. Se había creado otro mito.
Los primeros 80 vivieron el nacimiento de una moto del futuro. El diseño de la Katana pasará a la historia como una de las motos más icónicas de todos los tiempos. Suzuki encargó a Hans Muth, ex jefe de diseño de BMW, la realización de una moto al gusto de los europeos y para modernizar la imagen de su compañía. La moto era una sport turismo que se anunciaba por aquellos años como la más veloz del mercado.
Los motores de dos tiempos tuvieron un espectacular desarrollo entre las motos deportivas de los años 80. La Suzuki RG 250 es una moto soñada por los amantes de las clásicas de motores de agujeros, con un propulsor de dos cilindros en paralelo y una relación peso y potencia perfecta. Fue también la primera moto comercial en llevar un chasis de aluminio y un carenado similar al de las motos de carreras.
Ya en los años 80 BMW comenzaba a tener problemas con la evolución de sus motores boxer. En algunos países ya se comenzaba a hablar de motores más eficientes y menos contaminantes y, paralelamente, la firma alemana necesitaba dar una imagen más moderna de sus monturas. Las K 100 de cuatro cilindros, y las K 75 tricilíndricas, fueron la respuesta al ofrecer un motor muy singular que se basaba en algunos prototipos de Peugeot y Renault. También revolucionó el mercado al introducir la inyección electrónica en una moto de serie, un desarrollo que provenía de su división de autos.
La primera Kawasaki Ninja fue esta GPZ 900 R. Una de las grandes motos deportivas de los años 80 con un singular diseño y algunas soluciones técnicas revolucionarias, como su motor de 16 válvulas, el chasis que usaba en motor como elemento portante para reducir peso y mejorar la rigidez y unas extraordinarias prestaciones que la hacían alcanzar los 254 km/h.
Yamaha puso a la venta en 1984 un modelo inspirado en la moto que llevaba Kenny Roberts en competición, la YZR500. RD significa Race Developed y que tenía un motor de 500 V4 de dos tiempos refrigerado por agua. La admisión rotativa de la moto de competición fue sustituida por una caja de láminas diferente para cada pareja de cilindros. El chasis de acero era de tipo perimetral. Toda una carreras-cliente.
Yamaha siempre ha buscado nuevos segmentos con los que sorprender a los aficionados a las motos. La V Max 1200 fue una de las primeras “macho-bike” orientada en un principio al mercado norteamericano con un motor V4 de 1.198 cc y 140 cv. de potencia. Entre una custom y una sport turismo, la V Max estuvo en el mercado hasta el año 2007.
Las motos deportivas de los 80 tuvieron en la Suzuki GSX R 750 a una legión de incondicionales, toda una moto de carreras que estaba homologada y podía usarse en carretera legalmente. Su carenado era 100 por cien de competición, también sus prestaciones y su velocidad punta que alcanzaba los 230 km/h y batía a sus rivales más directas como la Yamaha FZ 750.
En los años 80 Japón mandaba, y si hablamos de motos deportivas, todavía más. Junto con las GSX R, la respuesta de Yamaha era esta FZ 750 con chasis de aluminio y motor de cuatro válvulas por cilindro. El motor tenía los cilindros inclinados 45 grados, algo que favorecía el diseño de su chasis Deltabox. Pronto, en 1988, llegaría el Mundial SBK y con él se desencadenaría la tormenta total de la máxima deportividad.
También Honda lucía en 1986 su carreras cliente, otro de los grandes mitos de las motos de los 80 como es la RC30. En su caso usó uno de los mejores motores desarrollados (entonces y ahora) el V4 a 90 grados de la marca del ala dorada. El bastidor de doble viga en aluminio tenía una peculiaridad en su basculante, de tipo monobrazo.
Para la revista Cycle World la Yamaha FZR 1000 fue la moto de la década, la mejor deportiva de los años 80. Marcó un nuevo hito en la velocidad punta hasta alcanzar los 269 km/h y llevaba ya el famoso motor EXUP, una válvula ubicada en la unión de los colectores del escape y que permitía el libre flujo de aire a altas revoluciones. La FZR 1000 se produjo desde 1987 a 1995, para dar paso a la Thunderace y a la R1 de 1998.
En el mundo del trial se produjo una gran revolución con la llegada de la Beta Zero y su flamante chasis monocasco de aluminio, que brindaba una gran rigidez y ligereza a un joven llamada Jordi Tarrés que venía dispuesto a batir el récord de títulos mundiales de la especialidad. A las motos de campo les llegó también la refrigeración líquida, frenos de disco y suspensiones de una progresividad nunca vista.
Si en el segmento de las motos deportivas había una guerra sin cuartel, en la popular categoría de las trail también hubo más que palabras entre los que se decantaban por la Yamaha Super Tenere y su motor de dos cilindros en línea y la Africa Twin. Yamaha hizo una moto de trail que en realidad era una turismo sport de primer nivel y que daría pie, años más tarde, a toda una saga de motos trail de carretera que se popularizaron en los 90 y 2000.
¿Quieres estar al tanto de todas las novedades de Moto1Pro y EnduroPro?
Suscribete a nuestro newsletter para no perderte el mejor contenido relevante, novedades, opinión, podcast, etc.
Desde que, a los 11 años apareció una Puch Minicross en mi casa, estoy vinculado al mundo de la moto. En 1988 comencé a colaborar en una revista nacional, aunando el periodismo y las motos. En 2000 comencé en el incipiente área digital de un medio especializado nacional, y auné, periodismo, las motos e Internet. En 2016 fiché por Moto1Pro y auné periodismo, las motos, Internet y un grupo de locos por las motos que son con los que comparto estas líneas. No se puede pedir más.
Relacionados