La publicación digital del motociclismo
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A lo mejor la Harley-Davidson LiveWire te parecía una moto atractiva, pero fuera de tu alcance (cara)... ¿Por una tercera parte del precio la habrías comprado? Pues esta subasta se ha quedado desierta... Pedimos de antemano perdón a los puristas que consideren a las motos eléctricas como algo detestable. Sí, lo reconocemos, nos gustan las motos, ¡todas! También las eléctricas, ¿por qué elegir cuando podemos aspirar a todo? Al menos en teoría, ya vendrá la realidad a quitarnos la ilusión.
Quizá no hay marca más asociada con la tradición que el águila de Milwaukee. Harley-Davidson ha conquistado el mundo con sus enormes motores bicilíndricos en V refrigerados por aire: sencillos, clásicos e inimitables (algunos lo han intentado pero no con mucho éxito). Por ello la compañía sorprendió a propios y extraños cuando anunció la llegada de la LiveWire.
Los harlystas cada vez son más maduros (viejos) por lo que los responsables de la marca decidieron matar dos pájaros de un tiro: apuntarse al carro de la electrificación y tener en su catálogo un producto que debería atraer a nuevos (y sobre todo jóvenes) clientes. Cuando la LiveWire llegó a las tiendas su precio de 33 700 euros significó una especie de muerte anunciada. Obviando las particularidades derivadas de los vehículos eléctricos: autonomía, puntos de recarga, y demás, pensamos que el coste de acceso frenó en seco las posibilidades de la LiveWire...
Dicho lo cual, la Harley-Davidson LiveWire pasará a la historia como la moto que supuso una revolución en la estrategia de la Motor Company. Una arriesgada apuesta que continúa en curso con la marca LiveWire ahora de manera independiente y cotizando en la bolsa de Nueva York.
El modelo Harley-Davidson LiveWire 2020, como la que ves aquí, declaraba 235 km de autonomía en ciudad. La batería de 24 kWh alimentaba el motor de 105 CV y aceleraba de 0 a 100 km/h en poco más de 3 segundos. El peso total de 247 kg se detenía con unos Brembo Monobloc con pinzas de cuatro pistones. La avanzada electrónica disponía de control de tracción, de par y de levantamiento de la rueda trasera, además ABS en curva.
La unidad que ves aquí, con solo 188 millas (303 km), la vendía la casa de subastas iconicmotorbikeauctions.com. La puja máxima quedó en 10 850 (9 961 euros) pero la moto no cambió de manos porque no se alcanzó el precio mínimo que se pedía. ¿Habrías pujado tú más? ¿O piensas que habría que haberla quemado como a los herejes?
Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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