La publicación digital del motociclismo
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La expresión carretera y manta resume la filosofía ideal para los aficionados al turismo. Tú, tu moto y el horizonte… A la hora de viajar con un vehículo de dos ruedas una de las mayores dificultades consiste en llevar el equipaje. Las motos no tienen maletero, como mucho pueden tener tres maletas, pero así todo la posibilidad de ir a la aventura con la casa a cuestas está bastante limitada. Lo que por otra parte tiene sus ventajas porque el ir ligero de equipaje (a lo Gandi) por la vida ofrece mucha libertad (interior y exterior) a aquel que es capaz de optar por esa opción vital.
La mayoría de los seres humanos no somos Mahatma (alma grande) Gandi y necesitamos un poco más que un taparrabos y un cuenco de leche de cabra. Y si queremos viajar con comodidad una de las elecciones posibles es un modelo icónico: la Honda Gold Wing. El fabricante japonés diseñó esta moto, que se presentó en el Salón de Colonia de 1974, pensando sobre todo en el mercado americano. Al otro lado del charco, un tipo viaje coast to coast, digamos San Francisco-Ciudad de Nueva York supone un trayecto de 4669 km. Para poner las cosas en perspectiva, la distancia entre Madrid y Moscú es de solo 4099 km.
Claro que para hacer un viaje de costa a costa en EEUU, y más si vas (bien) acompañado, será necesario poder transportar equipaje. Aquí te traemos el ejemplo de un aficionado que no se conformó con las dos maletas y el baúl superior ¡y optó por ponerle un remolque a su Gold Wing! Pensarás que esto son cosas de yanquis, pero en España también es legal que una moto lleve remolque. La ley dice al respecto: “Las motocicletas, los vehículos de tres ruedas, los ciclomotores y los ciclos y bicicletas podrán arrastrar un remolque o semirremolque, siempre que no superen el 50 por ciento de la masa en vacío del vehículo tractor…”.
El dueño de esta Gold Wing de 2001 la vendía en Estados Unidos tras publicar que: “el afortunado nuevo propietario se llevará además un remolque”. La Honda destaca por su motor bóxer de seis cilindros y 1832 cc, que además por primera vez abandonaba los carburadores para abrazar la alimentación por inyección electrónica. Con pasajero y equipaje, la Ala Dorada puede superar la media tonelada, pero una vez en marcha el peso desaparece como por arte de magia, aunque a muy poca velocidad hay que ir con algo de cuidado.
La Gold Wing que ves aquí llama la atención porque en el remolque transporta una sofisticada tienda de campaña Kompact Kamp Mini Mate 2014. “La tienda está en perfecto estado, en ella pueden dormir hasta dos personas pero lo más cómodo que se utilice en solitario”, explica el dueño. Además, no siempre tendremos que arrastrar el remolque. Al llegar al camping lo dejamos allí y luego nos ponemos a explorar la zona con la Gold Wing. Acabo de ver que Kiev está a solo 3632 km de los Madriles, ¡ese sí que podría ser un viaje inolvidable! Con o sin remolque...
Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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