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Según nuestros (bien informados) colegas de Motorrad, BMW lanza una gran campaña de inspección de cardanes en sus modelos boxer. La marca alemana asegura que el objetivo es “mejorar la calidad a largo plazo”. BMW Motorrad trabaja ya para que los talleres de los servicios oficiales estén preparados y sean capaces de enfrentarse a una campaña de revisión de estas dimensiones. A lo largo de los próximos meses se va a controlar el cardan de ¡440 000 motos! que se encuentran esparcidas por todo el mundo. Un buen número de estas unidades están en España donde la GS ha sido un (y sigue siendo) un éxito de ventas. Lo ideal sería que en las revisiones que ya tienen programadas estos modelos se aprovechen para inspeccionar a fondo el cardan.
La campaña va dirigida sobre todo a la gama más importante de BMW Motorrad: las trail GS con motor bóxer. De manera específica, las R 1200 GS y R 1250 GS a partir del año de fabricación de 2013. A estos modelos hay que sumar las Adventure y también las turísticas RT. De acuerdo con las informaciones, el problema puede venir por la junta, la articulación e incluso que haya corrosión interna. BMW ha enviado un comunicado a los concesionarios en los que se especifica: “Reajustar el drenaje y verificar el eje del cardan. Ocasionalmente se producen daños en el cardan, lo que afecta a la transmisión y en casos puntuales puede dejar de funcionar. El daño se debe a varios factores, por ejemplo influye la corrosión, sobre todo si ocurre en lugares que son importantes en lo que respecta al funcionamiento. El desgaste producido por el uso o por aspectos climáticos o dinámicos puede acabar dañando algunos componentes”.
Los problemas con el cardan se han detectado en las GS a partir de 2013 (que ya llevan el bóxer refrigerado por líquido), y también en las R 1200 RT y R 1250 RT. En la trail el cardan está sujeto a mayor estrés debido a que el recorrido de la suspensión es mayor y al ángulo de unión entre el cardan y la transmisión. En el caso de las RT, el sistema puede quedar afectado al bajar y subir bordillos altos.
Para no tener que abrir el cardan de cada una de las 440 000 motos, se le proporcionará a cada concesionario oficial una herramienta para comprobar el estado del mismo. El útil cuenta con sensores que miden las fuerzas y vibraciones. Si todo se encuentra dentro de los parámetros del fabricante, el cardan se da por “apto”. En caso contrario se inspecciona a fondo. Si fuese necesario reemplazar alguna pieza y se ha superado el periodo de los tres años de garantía, BMW decidirá cómo proceder dependiendo de la edad y el estado de la moto.
Además, se va a poner una válvula en el cardan, para lo que será necesario realizar un pequeño agujero. La válvula no dejará que entre nada del exterior pero sí que permitirá que salga el aire y la humedad que haya en el interior del árbol cardánico. El movimiento vertical (arriba y abajo) del brazo oscilante ayudará a que la válvula haga su trabajo. Se espera que la revisión dure unos 45 minutos que será, por supuesto, gratis para el cliente. Lo normal debería ser esperar a la próxima revisión, entonces los mecánicos de BMW inspeccionarán el cardan y le instalarán la nueva válvula.
Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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