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En el Salón de Milán, junto a la esperada XL750 Transalp, Honda presentó la CL500 una street scrambler (así es como la denomina el fabricante) llamada a continuar el éxito de la Rebel 500, con la que comparte el motor. Es sabido que en Japón los modelos de pequeña cilindrada tienen más predicamento que en Europa. Así, el gigante del ala dorada tiene ya preparada la que será la CL250. Un modelo con el que se especuló sobre si llegaría o no a la serie. Pues bien, la incógnita ha quedado despejada con las imágenes que han publicado los compañeros de autoby.jp.
La estética de la pequeña 250 es casi idéntica a la de la CL500, con un enorme silenciador que discurre de manera elevada por el lado derecho del asiento. Además de un depósito muy inclinado que se acopla por encima del tubo del chasis y una horquilla convencional provista de unos clásicos fuelles como se estilaba hace ya unas cuantas décadas. Aparte de la cilindrada, la gran diferencia es que la quinientos monta un bicilíndrico en línea mientras que en el caso de la dos y medio es un monocilíndrico.
La presentación de la Honda CL250 se hizo en Japón el mismo día que en el EICMA 2022 se mostraba la CL500, aunque el fabricante japonés todavía no ha desvelado las características técnicas del modelo pequeño. Las siglas CL tienen peso en la historia de Honda, el primer modelo que se llamó así fue la CL72 de 1962 que utilizaba un motor bicilíndrico en línea con simple árbol de levas en cabeza y ya con los escapes elevados, una seña de identidad que se ha mantenido.
A partir de la Rebel 250 (al igual que ha ocurrido con la 500), el fabricante japonés ha diseñado esta street scrambler. Otro detalle que se ha mantenido de la CL de 1962 son los protectores de goma en el depósito, un toque retro, al igual que los fuelles que protegen la horquilla. La CL500 estará disponible en el mercado europeo, pero no sabemos si ocurrirá lo mismo con su hermana pequeña. Nos atrevemos a decir que no veremos a la CL250 por estos puertos, de la misma manera que Honda tampoco importa al Viejo Continente la Rebel 250. Una pena penita pena.
Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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