La publicación digital del motociclismo
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Si bien Honda nunca ha sido muy amante de los motores de 2T, Yamaha sí que abrazó con pasión la tecnología de los motores de agujeros. La marca de los diapasones nos brindó algunos modelos inolvidables y uno de ellos fue la Yamaha RD350 de mediados de los años 80 (la primera RD350 salió al mercado en 1973). Como ha ocurrido con otros modelos, en Estados Unidos la moto se llamó RZ350 y allí también gozó de un gran éxito de crítica y público.
En una España peninsular en la que la llegada de las motos japonesas estaba todavía reciente, la RD350 gozó de una enorme legión de seguidores. Además, el aficionado hispano, que había crecido con las Bultaco, Montesa y OSSA conocía muy bien las bondades de los motores de 2T. Aunque la Yamaha RD350LC, con propulsor bicilíndrico, refrigeración líquida y YPVS (Yamaha Power Valve System – Válvula de escape), poco tenía que ver con nuestras queridas Bultaco Metralla. Las siglas RD eran un acrónimo de (Race Developed – Desarrollada en las carreras), lo que suponía toda una declaración de intenciones. De hecho, la RD350 fue un modelo ideal con el que se disputaron varias copas monomarca en distintos países.
El brasileño Renato Frateschi recuerda muy bien el año 1987, cuando la Yamaha RD350 YPVS F2 comenzó a venderse en su país. Una moto que utilizaba la receta mágica: potencia (más de 60 CV), ligereza y efectiva parte ciclo. Cuando uno de sus clientes no estaba seguro de cómo modificar su moto, Renato lo vio claro: “Mira, tengo un chasis y un depósito de una RD350. Creo que podemos hacer algo increíble con eso”, dijo al interesado. Por fortuna el cliente se dejó aconsejar y el resultado es esta maravilla que han sacado los compañeros de bikeexif.com.
El propulsor elegido procedía de una Yamaha R3 y como el bicilíndrico en línea de 321 cc no tenía, ni de lejos, la patada del 2T de la RD350, a Renato se le ocurrió el siguiente paso "lógico" (!): montarle un turbo de procedencia japonesa que instaló delante del propulsor. Para las ruedas se eligió unas de 17” procedentes de una Triumph Daytona 675 (las de la RD350 eran de 18 pulgadas). La carrocería se diseñó con un programa informático y luego se realizó en plástico ABS por medio de una impresora 3D.
Renato Frateschi ha bautizado su creación como RD Turbo y para la decoración ha empleado los inimitables speed blocks (bloques de velocidad) que popularizada King Kenny Roberts con su Yamaha 500 de color amarillo América, aunque en este caso la tonalidad es negra y roja. El resultado final nos parece de excelente calidad y gusto. Un verdadero tributo a la RD350 de mediados de los años 80, pensamos que hasta Kenny estará de acuerdo.
Tras estudiar periodismo e inglés, en los 80 me publicaron una entrevista con Kenny Roberts y desde entonces estoy en este mundo. Dispuesto a aprender hasta la caída de la bandera ajedrezada.
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